Javier Milei habló en el recinto de Diputados. Finalmente solo dijo lo de siempre y no presentó el Presupuesto 2025, que era el objetivo proclamado del Evento.
Javier Milei no presentó el Presupuesto. No conoce el funcionamiento del Estado, no sabe lo que es el Estado. Solo sabe decir las mismas frases en todos los discursos y brindar números incomprobables, regodearse de la desgracia ajena y agredir a los diputados opositores que tuvieron la delicadeza de recibirlo fuera de todo reglamento.
No hay otro resumen que se pueda hacer de su paso por el Congreso, en el recinto de Diputados más vacío que lleno de aplaudidores que -justamente- todos, absolutamente todos, cobran del Estado.
Tampoco parece saber que la Ley de Presupuesto es anual y no permanente. Su confusión sobre gastos, ingresos o sobre la metodología que dice que estará en el presupuesto es notable. Quedó expuesto cuando habló de los ajustes provinciales para la eliminación total del déficit fiscal y marcó el único dato claro: primero la deuda, segundo la deuda, tercero la deuda y después nada.
La descripción de cómo funciona la economía de un país que hace Javier Milei solo muestra que su pasión por el estudio de la economía no existe, ni nunca existió.
Un compendio de frases extractadas de diarios y lugares comunes de los economistas del establishment que no se sostienen en ningún tiempo ni lugar.
La cantidad de datos falsos, sacados de contexto y la soberbia son el único balance que se puede trazar de la reunión de amigos.
Un solo ejemplo: afirmar que sin inflación no hay distorsión de precios, no solo es falso, además es la clara muestra que Javier Milei no tiene idea de cómo funciona la economía argentina o cualquier economía moderna.
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Tampoco Javier Milei parece tener idea de cómo funcionan los estados de Alemania o Francia a quienes toma como muestra de un supuesto grado de libertad del Estado al que aspira llegar, según dijo en el recinto.
Todos los objetivos que dice perseguir están absolutamente en contradicción con cada una de las medidas que ha tomado hasta ahora el Gobierno.
El Presidente no habló de ninguno de los ítems que contiene el Presupuesto, ni dio un solo dato de cómo estará compuesto y cuáles serán sus prioridades, más allá del déficit cero o el superávit primario para pagar deuda.
Quedará para otro momento (quizás el miércoles) en la Comisión de Presupuesto y Hacienda saber qué dice y propone el Gobierno Nacional para el Presupuesto 2025.
Javier Mieli dejó en claro que es muy probable que ni él sepa que dice el Presupuesto que firmará junto a sus ministros para enviar al Congreso. El resto, los lugares comunes y las agresiones de siempre.