El gobernador Alfredo Cornejo envió un proyecto a la Legislatura para que Mendoza EPAS Ente de Agua y Saneamiento no exista más y sus funcionas sean absorbidas por el Departamento General de Irrigación (DGI).
El gobernador Alfredo Cornejo envió un proyecto a la Legislatura para que el ente que regula la prestación del servicio de agua potable no exista más.
El gobernador Alfredo Cornejo envió un proyecto a la Legislatura para que Mendoza EPAS Ente de Agua y Saneamiento no exista más y sus funcionas sean absorbidas por el Departamento General de Irrigación (DGI).
Actualmente, según se menciona en el documento, Irrigación “interviene activamente en la asignación del recurso hídrico, tiene presencia permanente en el territorio”, y “cuenta con una estructura institucional y de profesionales idóneos”.
De esta manera, se considera que la elección del DGI como ente regulador se fundamenta en su sólida trayectoria en la gestión de recursos hídricos, su “profundo conocimiento del territorio mendocino y su capacidad técnica para abordar los desafíos del sector”. Además, la institución cuenta con una extensa red de infraestructura y personal especializado, lo que permitirá optimizar los procesos y reducir costos.
El texto propone una nueva estructura regulatoria. En este sentido, se establece un marco normativo que permitirá adaptar la regulación del sector a las constantes evoluciones y desafíos, como por ejemplo el cambio climático y el crecimiento poblacional.
Además, al ampliar las funciones del Departamento General de Irrigación, éste tendrá un rol central para establecer las pautas tarifarias y el control de la calidad del servicio, ya que se implementarán mecanismos más rigurosos para garantizar que el agua suministrada cumpla con los estándares de calidad establecidos.
El Ente, según el proyecto, “atenderá a objetivos económicos, sociales y ambientales, procurando en este caso el sostenimiento y promoción de los espacios verdes vinculados directamente con la prestación”.
También se detalla que las tarifas deberán reflejar los costos de operación, mantenimiento, inversiones en expansión y renovación del sistema y amortización de los servicios y, en su caso, una retribución razonable para el operador, en el contexto de una administración eficiente.
Irrigación tendrá la función de elaborar planes estratégicos a largo plazo para el desarrollo del sector. También se garantizarán los derechos de los mendocinos a acceder a un servicio de agua potable de calidad y a un saneamiento adecuado. Se establecerán asimismo, mecanismos para que los usuarios puedan presentar reclamos y participar en la toma de decisiones.
"Se priorizará la protección de los recursos hídricos y la promoción de prácticas sostenibles en la gestión del agua, como la reutilización de efluentes y la eficiencia en el consumo", sostienen desde el Ejecutivo.
El proyecto detalla que el total del patrimonio del EPAS será transferido a entidades u organismos que se determinarán en su momento.
Sobre la situación de la planta de personal, el proyecto sostiene que “el Poder Ejecutivo dará pleno cumplimiento a las normativas vigentes en materia laboral, priorizando la situación del personal del Ente. Previa preselección del personal que se realizará antes de la fecha de su disolución, se ofrecerá a los trabajadores en relación de dependencia con el Ente Provincial del Agua y de Saneamiento una alternativa definitiva de conformidad”.