El auditorio Ángel Bustelo vibró anoche al ritmo Tan Biónica, la banda revelación del último tiempo. Luego del éxito de Obsesionario, el grupo liderado por Chano Moreno Charpentier presentó Destinología, su último trabajo discográfico.
El auditorio Ángel Bustelo vibró anoche al ritmo Tan Biónica, la banda revelación del último tiempo. Luego del éxito de Obsesionario, el grupo liderado por Chano Moreno Charpentier presentó Destinología, su último trabajo discográfico.
Después de la euforia el Chano tomó su guitarra y cantó Tus ojos mil, corte de la última placa discográfica. A esos temas le siguieron Beautiful, Mis noches de enero y Momentos de mi vida.
Lo prometimos y volvimos, dijo el líder del grupo. Y la mejor noticia vino cuando Chano adelantó que uno de los conciertos de cierre del tour destinológico será en Maipú.
Por fin hemos dejado de ser Tan Biónica para convertirnos en el piberío biónico; dijo el cantante de la banda que siguió luciéndose con temas como El asunto y Lunita de Tucumán.
El momento más eufórico de la noche vino con Ciudad mágica, el primer single del último CD y la Melodía de Dios, un clásico esperado por todos. La fusión de luces y los sonidos electrónicos fueron el condimento perfecto para que el público palpitara al ritmo de la banda de pop rock que está en su mejor momento.
El destino es una adivinanza de todo aquello que no hicimos, no hay nada escrito para nosotros si no que somos lo que escribimos. Esta colección de maravillas y sueños se llama destino, dijo Chano.
El grupo bonaerese cerró el espectáculo a las 23.30 y el broche de oro fue una de las canciones más esperadas por todos: Obsesionario en La Mayor.
A pesar de ser la banda del momento y que todas las entradas tenían un costo de $150 Tan Biónica no logró llenar el Bustelo. De hecho hace unos días se anunció que los tickets estaban agotados pero anoche se vendían en taquilla.