Las fuerzas de seguridad de Túnez no pudieron frenar a los atacantes "hasta que terminaron sus municiones", señala el mensaje. También la plataforma Site, que se ocupa de rastrear la actividad online de yihadistas, informó del mensaje.
En tanto, el Ministerio de Salud de Túnez cifró en 47 el número de heridos, además de los 23 muertos. Sumados a éstos, dos atacantes, cuya nacionalidad fue confirmada como tunecina, fueron abatidos por las fuerzas de seguridad.
Uno de los dos atacantes abatidos era conocido por las autoridades de seguridad, aunque sin un vínculo claro con ninguna organización extremista en particular, afirmaron a la radio RTL el primer ministro del país, Habib Essid.
Ambos formaban parte del comando que disparó primero fuera del museo, una de las principales atracciones turísticas del país, y que luego tomó rehenes en su interior. El museo está en el mismo complejo de edificios que el Parlamento, que estaba sesionando en el momento del asalto.
Como consecuencia de las investigaciones, las fuerzas de seguridad han detenido hasta el momento a nueve sospechosos de estar involucrados en los atentados. Las autoridades explicaron que cuatro de los detenidos estaban directamente vinculados con el hecho, mientras que los otros cinco tuvieron contacto con ellos.
Las víctimas extranjeras son de nacionalidad española (dos), japonesa, colombiana (dos), británica, polaca, francesa, italiana, australiana y belga. Murieron además tres tunecinos, uno de ellos un policía.
Situación política de Túnez
Túnez, donde comenzó la llamada Primavera Árabe, es el único país de la región que ha conseguido una transición democrática estable. Pese a ello, el problema del yihadismo no le es ajeno y se producen enfrentamientos regulares entre las fuerzas de seguridad y grupos radicales, sobre todo en las zonas fronterizas.
Además, el país es un gran exportador de yihadistas a Siria e Irak, donde los tunecinos formarían el mayor contingente de extranjeros. Se cree que entre 1.500 y 3.000 personas de esta nacionalidad se han unido allí al EI y a otras milicias extremistas.
El presidente de Túnez, Beji Caid Essibsi, declaró que su país combatirá el terrorismo "sin misericordia". "Los tunecinos están en guerra con el terrorismo", aseguró en un mensaje televisado a la población. "Estas células minoritarias y bestiales no nos derrotarán. Resistiremos sin compasión ni misericordia. Emergeremos victoriosos", añadió.
Essibsi, que asumió el puesto en diciembre, prometió que su nación mantendrá la democracia y luchará hasta "acabar con estos traidores".
El atentado, que duró unas cuatro horas, fue condenado en todo el mundo. La primera dama estadounidense, Michelle Obama, expresó sus condolencias desde Japón, donde se encuentra de visita. Habló en su nombre y en el del presidente Barack Obama.
El papa Francisco también se mostró conmovido por el ataque y envió un telegrama al arzobispo de Túnez en el que condena "todo acto contra la paz y la sacralidad de la vida humana".
Los jefes de Estado y de gobierno de la Unión Europea (UE) guardaron hoy un minuto de silencio durante la cumbre de Bruselas en homenaje a las víctimas.
El ministro del Interior francés, Bernard Cazeneuve, viajará mañana a Túnez donde analizará medidas bilaterales para combatir el terrorismo.
En las conversaciones a alto nivel se hablará sobre cooperación en cuestiones de seguridad, señaló. Francia ayudará a Túnez a esclarecer el trasfondo del atentado del miércoles.
En tanto, dos compañías de cruceros confirmaron hoy que en total 15 de sus pasajeros murieron y otros tantos resultaron heridos en el atentado. Varias empresas de cruceros decidieron quitar a Túnez de sus destinos de viaje. (DPA)