Ricardo Mollo y un crudo testimonio acerca de la muerte de Luca Prodan
Hoy cumple 66 años Ricardo Mollo y salió a la luz su testimonio del día que encontró muerto a Luca Prodan
Foto: Cristian Lozano
Hoy, 17 de agosto, cumple 66 años uno de los artistas más reconocidos del rock nacional: Ricardo Mollo. Conformó dos de las bandas más trascendentes de la música nacional, fue guitarrista deSumo en la década de los ‘80 y, luego, encabezó Divididos, grupo del que también es vocalista y que convoca a miles de personas en cada show. Y hace poco, en una entrevista, dio a conocer su testimonio y contó que fue la primera persona que encontró muerto a Luca Prodan en su departamento.
Ricardo Mollo nació en la ciudad bonaerense de Pergamino el 17 de agosto de 1957, y desde pequeño aprendió canto gracias a su hermano mayor Omar y fue recién a los 9 años cuando se animó a cantar en público en un concurso de canto en la sociedad de fomento de Temperley. Durante su adolescencia conformó diferentes bandas y no fue hasta 1984 cuando formó parte de Sumo y conoció a Lucas Prodan.
En aquel momento, había recibido una invitación del bajista Diego Arnedo, quien años más tarde iba a ser su socio musical en Divididos. Sumo existía desde 1981, pero su formación fue variando desde sus inicios. En 1985, el grupo de Hurlingham lanzaría su primer disco, “Divididos por la felicidad”, que sería un éxito y recibiría el reconocimiento de la revista especializada Rolling Stone -fue considerado el quinto mejor álbum del género de todos los tiempos-. Acaso en la cresta de la ola, cuando ya había salido al mercado “After Chabón” y la banda no paraba de llenar estadios y discotecas, se produjo la tragedia.
Prodan, que tenía problemas con las adicciones, les había anticipado a sus familiares y a sus propios compañeros que su salud era frágil. Incluso, llamó a su hermano Andrea, que en aquel momento residía en Italia, para pedirle que viajara a la Argentina. Tras el último recital de Sumo, que se llevó a cabo en Los Andes ante apenas 500 personas, nadie esperaba el desenlace final.
El 22 de diciembre de 1987, Mollo ingresó a la vivienda del vocalista, que estaba ubicada en el barrio de San Telmo y que hoy en día se convirtió en un templo para los fanáticos del grupo. Poco antes, varias personas habían llamado a la Policía con el objetivo de irrumpir en la casa del europeo después de varios intentos fallidos para comunicarse con él, pero el guitarrista llegó primero.
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“Fue fuertísimo, fue desgarrador. Creo que fue una de las cosas más dolorosas que me pasaron. No pude decirle al cuerpo ‘quedate tranquilo’. Se precipitó todo muy rápido. Llegamos a la casa y lo levanté, estaba la mitad del cuerpo en el colchón y la otra en el suelo. Estaba tan frío que le apoyé mis manos en el pecho para calentarlo. Era lo que había quedado de Luca porque ese tipo ya no estaba ahí, acá no hay nadie”, sentenció el líder de Divididos, entre sollozos, en una entrevista con Urbana Play.
Incluso, el músico advirtió que siguió estando en contacto con Prodan luego de su fallecimiento por una cirrosis hepática: “Sentía el olor a jazmines, que era el olor que se percibía en la habitación. Cuando me iba a un campo y caminaba solo por ahí, de pronto venía ese pensamiento. Fue en ese momento de desazón total y de tránsito del duelo que empezamos a tirar nombres para un nuevo proyecto, creo que la mejor decisión fue no seguir con el anterior”./TN