En la apertura de este jueves, el dólar sube con fuerza mientras los bonos globales argentinos en dólares registran fuertes bajas, tras la derrota parlamentaria para el Gobierno nacional. Además, el riesgo país aumenta y ya supera los 1.300 puntos.
El dólar se dispara mientras los bonos caen y el riesgo país sube. Los mercados evalúan la situación política y fiscal.
En la apertura de este jueves, el dólar sube con fuerza mientras los bonos globales argentinos en dólares registran fuertes bajas, tras la derrota parlamentaria para el Gobierno nacional. Además, el riesgo país aumenta y ya supera los 1.300 puntos.
En este contexto, el riesgo país asciende 86 puntos y alcanza los 1.333, profundizando la tendencia negativa que se viene observando en los activos argentinos durante las últimas semanas. Los precios de los bonos globales muestran caídas desde el inicio de la jornada.
El Global 29 cotiza a 21,43 y 69,12; el Global 30 a 20,25 y 65,38; el Global 35 a 16,11 y 51,45; mientras que el Global 38 registra 17,12 y 54,53. Completan la serie el Global 41 con 15,55 y 48,68, y el Global 46 con 15,79 y 50,35. Todas las referencias acompañan retrocesos que oscilan entre -1,71% y -2,34%.
En el inicio de la jornada, el dólar oficial, según el Banco Nación, cotiza a $1.490 para la venta y $1.440 para la compra, acercándose a los $1.500 y generando preocupación en el mercado.
El dólar blue sube y se ubica en $1.490 para la compra y $1.510 para la venta. Por su parte, el dólar MEP también inicia la jornada al alza: $1.507,09 para la compra y $1.508,16 para la venta.
Asimismo, el dólar tarjeta cotiza a $1.937 para la venta, de acuerdo a El Cronista.
El jueves arrancó con caída de los bonos argentinos y aumento del riesgo país, luego de que el oficialismo sufriera dos vetos consecutivos rechazados en el Congreso de la Nación Argentina. Las recientes votaciones legislativas representan un nuevo revés para el Gobierno, generando incertidumbre y aumentando la presión sobre los precios de los bonos.
La suba del riesgo refleja el deterioro de las expectativas de los inversores tras el rechazo de vetos presidenciales por parte de la Cámara de Diputados, lo que incrementó la preocupación sobre la política fiscal futura. El mercado interpreta que el oficialismo pierde capacidad para sostener el programa de ajuste consensuado con los inversores y que la gobernabilidad se debilita, afectando directamente la deuda soberana.
El clima de incertidumbre se profundiza tras la aprobación de leyes que implican mayor gasto público y limitan las facultades del Ejecutivo para ajustar partidas, en un escenario donde los compromisos con organismos multilaterales y la necesidad de financiamiento externo requieren mantener un rumbo fiscal estricto.
Con bonos y acciones en baja, riesgo país al alza y spreads ampliándose, la plaza argentina se mueve en un contexto de desconfianza extrema. Cada derrota legislativa, cada señal de debilidad del Banco Central y cada retroceso en reservas se traduce en más ventas y menor interés inversor.
Los analistas advierten que, sin un shock de confianza, será difícil revertir el deterioro. Aunque el contexto internacional acompaña, la ausencia de señales políticas claras y la falta de respaldo fiscal siguen marcando los precios de los activos locales.
En este marco, los inversores se mantienen en modo defensivo, priorizando la cobertura cambiaria y retirando flujos de la plaza local a la espera de definiciones que devuelvan previsibilidad al rumbo económico.
Mientras tanto, la plaza financiera argentina continúa aislada del resto de los emergentes, con bonos que caen, riesgo país en aumento y un mercado en alerta permanente/ Infobae e Iprofesional