- Las diferencias tienen que ver con la impronta que le da cada gobernador, y que modifican lo que uno le pueda dar al ministerio que tenga a cargo. Nosotros veníamos con un trabajo enfocado en la lucha contra el narcotráfico, en el avance tecnológico, y en el trabajo humano con los policías, mejorando año tras año los sueldos y las condiciones de ascenso. Como desafío nos planteamos continuar incorporando tecnología, lo que hace más eficiente la labor policial. También hay una preocupación desde la seguridad vial, desde donde trabajaremos desde una política transversal, con las cámaras de videovigilancia, como ejes centrales.
- Apuntamos a mejorar las condiciones de trabajo y cantidad de efectivos en la Policía Rural, porque los delitos se van corriendo de las grandes urbes. En cuanto al equipamiento, ha sido pareja para toda la Policía, quizá hay que darle más personal y extender los lugares de trabajo, y que la Policía no sólo se encarguen de los animales sueltos.
- ¿La creación de la Policía del Metrotranvía fue un pedido de Pérez?
- La idea surgió cuando él era ministro de Infraestructura, y ahora ha pedido que lo acentuemos. Esto tiene que ver con la especialización de la Policía en ciertas tareas. Por ejemplo en el parque San Martín inauguraremos la Policía del Parque, que estará en colaboración con la gente de Parques y Zoológicos. Buscamos hacer hincapié en los trabajos interministeriales.
- ¿Se sigue trabajando con el resonado mapa del delito?
- El mapa del delito fue utilizado como latiguillo político y como una crítica permanente, a partir que se atribuyó el triunfo del peronismo a eso. Desde Planeamiento Estratégico se trabajó siempre con el mapa, que anteriormente se realizaba en papel y lápiz. Nosotros seguimos teniendo un mapa de la siniestralidad y de los robos, pero somos conscientes que las críticas terminando perjudicando a la Policía.
- Siguen existiendo quejas con respecto al funcionamiento del 911, ¿por qué aún no se logra la eficacia en el sistema?
- No quiero poner excusas, pero entran 10.000 llamadas por día y más del 60% no son para una emergencia. Esto interfiere con la eficiencia del sistema. Es verdad que muchas veces la atención no es la más adecuada, y nosotros lo que tratamos es de concentrar todas las llamadas para que entren al 911 de Mendoza y no sean derivadas, pero también apelamos a que la gente que llama de la información adecuada que faciliten nuestra labor. De todas formas, todos los llamados quedan grabados y encriptados, para poder corregir los errores.
- Siempre hubo un cruce entre el ministerio de Seguridad y el Poder Judicial respecto a las estadísticas, ¿durante la nueva gestión, quienes manejarán los datos oficiales?
- Quien debe llevar las estadísticas es el Poder Judicial, porque muchas veces cuando una investigación avanza se demuestra que el hecho no fue tal cual se denunció. Para nosotros, las estadísticas sirven como alerta, a medida que aparecen necesidades se discriminan la información como en el caso del femicidio y de los menores que intervienen en un delito. Pero insistimos que debe darlas el Poder Judicial.
- En 2011 disminuyen los homicidios en ocasión de robo, ¿cuáles creen que fueron las causas?
- El año pasado hubo 120 homicidios y sólo 4 fueron en ocasión de robo. Esto tiene que ver con que las penas que se dan en estos casos son muy graves, se los condena por homicidio criminis causa y eso es un mensaje fuerte. A esto se le suma el trabajo de la Policía en el esclarecimiento de los hechos. De todas maneras, se mantiene la cifra de crímenes entre personas que tenían algún tipo de relación, ya que son circunstancias difíciles de combatir.
- ¿Qué tipo de delitos son los que más preocupan a la cartera?
- Los robos contra la propiedad, que son delitos cometidos por bandas organizadas en los que hay asaltos programados. Para esto hay dos maneras de combatirlo: primero con las tareas de inteligencia y la prevención. Por lo general siempre hay un dato que los llevan a robar en algún lado, y hay que concientizar que la gente no diga que se va de vacaciones, y cuidarse con la información que se da en las redes sociales. Por otro lado, nunca nos dejó de preocupar el narcotráfico y el robo de automotores donde trabajamos fuertemente en los controles porque se trata de delitos que a su vez generan otros delitos.
- En las últimas semanas aparecieron algunas pintadas en San Rafael donde señalaban que los derechos también son de la Policía, ¿cuáles eran los reclamos puntuales?
- Las pintadas son anónimas, y cuando no dan la cara... Siempre que hay cambios en las jefaturas hay resistencias, ahora de allí a realizar pintadas
Los que se manifestaron anónimamente creo que esconden algunos intereses personales que no tienen que ver con el espíritu de la Fuerza.
- A raíz de las revueltas carcelarias se dijo que existía una puja de poder entre los penitenciarios recién ingresados y los de carrera, ¿también ocurre dentro de la Policía?
- Lo de la nueva policía y la vieja es un mito. Sí hay una realidad, el proceso de incorporación de policías ha hecho que cambie la relación y el trato entre los subalternos y los comisarios, hoy desde el ministro hasta los jefes tienen una relación diferente porque el mundo cambia y la Policía cambia, y algunos son más rápidos en adaptarse.
- En los últimos meses se registró un alto índice de suicidios en policías, ¿qué se hace desde el ministerio ante estos hechos?
- Es un tema que nos ocupa porque las presiones del trabajo de la Policía son altas, por eso se apela al incentivo permanente. Estamos tratando de coordinar con Salud para mejorar el apoyo psicológico del policía.
- ¿Por qué eligió como subsecretario de Seguridad a un civil y no a un policía como en su anterior gestión?
- Cuando nos hicimos cargo de la Seguridad, en 2009, planteamos que la Policía debía recuperar espacios discutiendo temas de seguridad. Hoy no hay dudas que la Policía y el poder político trabajan juntos y a la par. El policía comprendió cual es su rol y ahora resta seguir acentuando acercar la Policía a la comunidad y buscar el punto de encuentro. Para hacerlo es importante que sea alguien que viene de la política (Emilio Caram, es abogado y militante peronista). Esto fue una decisión del Gobernador, sabíamos que era un puesto clave y una señal importante hacia otros sectores y fue muy hablado con él.
- Es uno de los únicos ministros de Jaque que fue ratificado en su cargo y en los últimos días Pérez respaldó su encuentro casual con Di Zeo, ¿se siente que es uno de los ministros con más apoyo del Ejecutivo?
- El gobernador tuvo un gesto de respaldo al proyecto, que es un trabajo de equipo y no tiene que ver con las personas. Nosotros podemos ser amigos o no, pero en lo institucional estoy a disposición del gobernador, y su apoyo es un apoyo a la continuidad del trabajo y del equipo, que permite que cuestiones de largo plazo se llevan adelante, como dar un vuelco a la capacitación del personal. Lo circunstancial son las personas, sé que si hago bien las cosas seré apoyado, pero el respaldo tiene que ver con el cuidado de un área sensible y con la necesidad de salir de la polémica. Entiendo cómo se politizan las cosas, pero al final, el objetivo era que el operativo del partido Boca River saliera bien.
- Pérez confirmó que existió una negociación con el barrabrava Di Zeo, pero usted insiste en que se trató de un encuentro casual
- Es que se trató de un encuentro casual, fue absolutamente como lo expliqué.
Desde Boca a Calle 13
Si bien Aranda está a cargo de una de las áreas en las no existen ni feriados ni vacaciones, el ministro confió que en sus horas libres aprovecha para jugar al fútbol y pasear con sus hijos.
Cuando puedo voy a caminar al parque, es más el otro día fui con mis hijos a la calesita del y una señora se me acerca y me dice si era Carlos Aranda, porque como miraba a los alrededores y no veía policías bromeó el ministro.
Aranda es confeso seguidor de Boca y de Independiente Rivadavia y escucha, por lo general, rock nacional, aunque en los últimos meses se tentó con los discos de Calle 13 y No te va a gustar.