También admitió "todos saben" cómo los barras costean sus viajes y estadías en el exterior. Dijo que los socios "se quejan" de que les cobran 100 o 200 pesos por dejar el auto, que van a parar a las arcas marginales de los barras bravas, así también a través de los "puestos de comida o ropa trucha".
A Di Zeo y sus seguidores el mundo, a través de la televisión, los vio apalear a un hincha de Chacarita en un amistoso dentro de la Bombonera. La sanción llegó por la vía de la Justicia, Boca durante años le franqueó el paso.
Dentro de dos semanas, Mauro Martín volverá a la segunda bandeja y más adelante le dará la bienvenida a su otrora jefe y también enemigo, para compartir el paraavalancha.