Marcelo Gallardo, entrenador de River Plate, remarcó anoche que solamente "la voluntad y espíritu de los jugadores" le permitió a su equipo rescatar un agónico empate 2-2 con Tigres de Monterrey, en México, por la penúltima fecha de la zona 6 de la Copa Libertadores, resultado que posibilita albergar esperanzas de avanzar a la segunda fase.
"La voluntad y espíritu de los jugadores nos devuelven una cuota de esperanza. Tal vez sea una pequeña señal para el futuro", destacó el técnico 'millonario', quien por segundo cotejo consecutivo estuvo fuera del banco (dirigió su ayudante de campo Matías Biscay), al cumplir una sanción.
"Jugamos el peor partido de la Copa (Libertadores). Hoy sin generar mucho, sin tener un buen nivel, pudimos encontrar el empate", se sinceró el 'Muñeco', una vez finalizado el cotejo en el estadio de la Universidad de Nuevo León.
"No hicimos un partido dentro de nuestras posibilidades, se nos hizo muy cuesta arriba, sobre todo en el primer tiempo", reiteró el director técnico.
River, con 4 unidades en la tabla zonal, ocupa la tercera colocación en el grupo y deberá ganarle imperiosamente el miércoles próximo a San José de Oruro (3), además de esperar que Juan Aurich de Perú (6) no le gane a Tigres (11), para meterse en la segunda fase.
"El partido nos costó siempre. Cambiamos un poquito en el segundo tiempo, donde tuvimos mayor participación", sostuvo.
"Creo que lo mejor que mostramos fue no bajar nunca los brazos, más allá de la baja performance del equipo", elogió Gallardo.