El gobierno de Javier Milei ha autorizado a las prepagas a limitar la cobertura que brindan a sus afiliados, según lo establecido en la Resolución 3934/2024 publicada en el Boletín Oficial. Esta normativa determina que solo los médicos que figuren en la cartilla de cada prepaga pueden prescribir medicamentos y tratamientos. La decisión se fundamenta en la necesidad de “garantizar la sostenibilidad del sistema”, buscando así un uso más controlado de los recursos.
La resolución establece una diferencia entre los planes abiertos y cerrados. En los planes abiertos, los beneficiarios pueden optar por la atención tanto en prestadores de la cartilla como en prestadores externos, mientras que en los planes cerrados, la cobertura está limitada a los prestadores incluidos en la cartilla. Esto significa que solo los médicos de la cartilla están habilitados para prescribir prácticas médicas o medicamentos, lo cual implica una restricción significativa en la libertad de elección del paciente.
Uno de los puntos clave de esta medida es controlar la prescripción de medicamentos de alto costo, ya que actualmente cualquier profesional puede hacer recetas, generando un aumento en el gasto para las prepagas y obras sociales. Con esta nueva disposición, en los planes cerrados, solo los médicos que integran la cartilla del Agente del Seguro de Salud podrán hacer las prescripciones. Este cambio busca reducir el impacto financiero de las prescripciones realizadas fuera de los prestadores autorizados.
Por último, la normativa impone a las prepagas la obligación de proporcionar una cartilla actualizada que detalle a los profesionales y centros médicos incluidos, especificando si el plan es abierto o cerrado. Además, la resolución advierte sobre el riesgo de desfinanciamiento en caso de que una resolución judicial exija la cobertura de prácticas no contempladas en los planes, lo cual podría afectar la sostenibilidad del sistema y comprometer los recursos destinados a la salud.