Cuenta regresiva para una elección con un clima enrarecido
Este domingo se llevarán a cabo las PASO en los siete departamentos que desdoblaron sus comicios, con un contexto muy distinto al de las PASO. Lo que se juegan.
Este domingo 3 de septiembre se realizarán las generales en Maipú, Santa Rosa, Lavalle, La Paz, Tunuyán, San Carlos y San Rafael.
Este domingo 3 de septiembre se realizarán las generales en Maipú, Santa Rosa, Lavalle, La Paz, Tunuyán, San Carlos y San Rafael, en donde el peronismo arriesga mantener el poco poder ejecutivo que le queda tras los resultados de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias provinciales y nacionales que le fueron adversos; y el radicalismo se arriesga a que sea la segunda elección consecutiva con resultados negativos.
El radicalismo no llega a esta instancia en la misma condición que a las PASO del 30 de abril. A esa primera elección llegó sabiendo que los candidatos propios se enfrentaban al poder del peronismo en sus principales bastiones. De hecho, eso explica la decisión del desdoblamiento de los comicios por parte de los intendentes.
Sabiendo que el escenario era complejo, esta elección fue tomada por Cambia Mendoza como un "test" respecto a la implementación de la Boleta Única por primera vez. Sin embargo, obtuvo algunas buenas sorpresas para el frente, como el porcentaje logrado en Maipú (cercano al 30%) y en San Rafael (35.5%).
Luego vinieron las PASO provinciales, en las que celebró el 42.68% obtenido, ratificándose como uno de los referentes más fuertes del "cambio" a nivel nacional; superando ampliamente a Omar De Marchi, que compitió por La Unión Mendocina y que logró el 20.29%; y el Frente Elegí, en cuya interna se impuso Omar Parisi 15.68%.
A partir de eso, Cambia Mendoza tuvo algunas victorias, como la decisión de Patricia Bullrich de elegir como compañero de su fórmula presidencial al mendocino Luis Petri (que en las PASO logró un 17% de votos).
Sin embargo, el resultado de las Primarias nacionales cambió todo. El triunfo de Javier Milei marcó un punto de inflexión porque el candidato de La Libertad Avanza obtuvo un caudal de 45% de votos en Mendoza; mientras que a nivel nacional llegó al 30% (apenas 2% más que Bullrich).
Pero en la Provincia el desempeño del referente liberal fue algo inesperado: casi 17 puntos arriba de Juntos por el Cambio (JXC), sumando las listas de Bullrich y de Horacio Rodríguez Larreta. El impacto fue tan fuerte que al habitual festejo colmado de referentes que viene realizando Cambia Mendoza desde el 2013; le sobrevino una escueta conferencia de prensa con la presencia de algunos pocos radicales.
Como efecto colateral, la figura de De Marchi aliado en La Unión Mendocina a los aliados de Milei en La Libertad Avanza, hace prever una capitalización de votos de sectores indecisos, lo que preocupa al radicalismo.
La esperanza peronista
Maipú, Santa Rosa, Lavalle, La Paz, Tunuyán y San Rafael son los bastiones peronistas en la Provincia de Mendoza. Y si se trata de resultados, para el peronismo -a juzgar por los números de las PASO- fue una estrategia positiva desdoblar sus comicios.
El desafío es poder ratificar esos números, para mantener el poder territorial.En el caso de Maipú, el intendente Matías Stevanato busca su reelección; lo mismo que en Santa Rosa la intendenta Flor Destéfanis y en La Paz el intendente Fernando Ubieta. Mientras que en San Rafael el intendente Emir Félix no tiene más chances de seguir gobernando por lo que su candidato es su hermano Omar; al igual que Martín Aveiro en Tunuyán, que respalda a Emir Andraos; y Roberto Righi en Lavalle, donde su candidato perdió la interna frente a Edgardo González. El lavallino pegó el portazo y se alineó tras el proyecto de De Marchi.
Para el peronismo el resultado de las PASO provinciales fue un nuevo golpe en un partido que viene perdiendo sucesivas elecciones. Por eso, el resultado de este domingo puede ser un impulso.
Sin embargo, la poca distancia que Milei le sacó a Sergio Massa a nivel nacional fue un aliciente, teniendo en cuenta que el resultado fue de tercios (Milei - Bullrich - Massa).
La especulación respecto a la migración de los votos "larretistas" hacia otros espacios (en lugar de quedarse con Bullrich) los hace entusiasmarse con un posible balotaje.