Un malviviente de 26 años quedó detenido en las últimas horas por estar señalado de cometer varios robos a mano armada en el departamento de Maipú. El sospechoso, conocido como el "Loco de la Playera", usaba una bicicleta de este estilo para atacar a las víctimas en plena calle y robarle las pertenencias. Le secuestraron un arma de fuego con los que cometía los golpes.
El procedimiento fue realizado por personal del Grupo Operativo de Maipú mientras controlaban la "Zona del Bloque" en Gutiérrez, un lugar marcado por diferentes delitos, enfrentamientos armados y por varios personajes relacionados a la venta de estupefacientes.
Fue en calle Boedo donde los policías observaron a un individuo que circulaba en una bicicleta naranja y que, al ver a los policías, quiso escapar corriendo y a toda velocidad.
Los policías salieron en persecución y el sospechoso tiró un elemento en Boedo y Río Juramento. Después la fuga continuó por un descampado hasta que el móvil 2813 le dio alcance en la intersección de las calles Lorca y Williams Morris y lo detuvieron.
Luego confirmaron que lo que había tirado era un revólver calibre 22 largo y el individuo fue identificado como Héctor Maximiliano Ríos Pérez, con domicilio en la manzana D del barrio Libertad de Gutiérrez. Quedó detenido y a disposición de las autoridades judiciales.
El detenido, conocido como el "Loco de la Playera", es investigado en al menos cuatro causas donde se lo involucra de manera directa con robos a mano armada. Este individuo operaba en la vía pública y en la bicicleta color naranja.
Según averiguaciones practicadas, Ríos seguía a las posibles víctimas mientras caminaban por la vía pública. "Las seguía por un par de metros y se fijaba si tenía celular u otros elementos de valor", señalaron.
De esa manera, cuando estaba cerca de las víctimas, se bajaba del rodado y las amenazaba con armas de fuego. Luego le sacaba las pertenencias y escapaba nuevamente en la playera.
De acuerdo a las denuncias que recibieron en el último tiempo, las víctimas, en su mayoría, son mujeres. "En la mayoría son mujeres pero no distingue ni edades ni sexo", admitieron. Además, cometía los golpes entre las 16 y las 20 horas, en la mayoría de los casos.