La crisis que se
vive en Venezuela tiene su repercusión en el resto de Latinoamérica,
y Mendoza no queda al margen. Durante 2018, las y los ciudadanos de
ese país (y de Bolivia) estuvieron arriba en el ranking de
extranjeros que se radicaron en la provincia.
Si bien
históricamente fueron los nacidos en la tierra que preside Evo
Morales quienes lideraron los arribos, el año pasado las cifras se
modificaron. Así, de las 5926 personas que buscaron establecerse en
Mendoza, el 35% fueron venezolanas, casi el mismo porcentaje bolivianas y
el restante estuvo compuesto por individuos provenientes de
naciones del Mercosur o del resto del mundo.
El titular de la
delegación local de Migraciones, Pablo Narváez, habló con SITIO
ANDINO y explicó cuáles son las formas en las que una o un
extranjero puede llegar a la Argentina. "Actualmente hay tres
maneras: como refugiado político, por visado humanitario o por
turismo", indicó. No obstante, el Estado argentino solo acepta en
la segunda opción a ciudadanos sirios.
"Aunque algunos
venezolanos piden asilo político, no es necesario, ya que el Estado
los consisdera dentro del Mercosur por lo que ingresan libremente",
aclaró el funcionario. Esto ocurre a pesar de que el bloque
económico suspendió en agosto de 2017 al país conducido por
Nicolás Maduro (y con Juan Guaidó autoproclamado "presidente
encargado") por tiempo indeterminado.
De esta manera, la
gran parte de las y los caribeños que vienen a Mendoza ingresan como
turistas. Posteriormente, piden la renovación de ese permiso y,
finalmente, solicitan la residencia permanente.
A partir de esto, la
Dirección de Migraciones exige la entrega de la documentación que
acredite identidad, el Certificado de Antecedentes Penales y las
partidas de matrimonio o de nacimiento para hijos/as, si fuera
necesario; todos estos papeles con la correspondiente certificación
y estampillado.
"Si falta
documentación, el trámite se inicia igual. A los 60 días, nuestro
cuerpo jurídico se comunica con las embajadas o consulados y, sino,
tratamos de verificar con datos colaterales, como encuestas de
convivencia a la pareja", relató Narváez.