Escándalo en el duelo de fútbol entre Boca y Gimnasia por los cuartos de final de la Copa Argentina en el estadio Coloso Marcelo Bielsa. El grave cruce entre las barras resultó en una fuerte represión policial contra el público Xeneize con balas de goma y gases lacrimógenos, tensa situación que solo se disipó tras la intervención de Juan Román Riquelme en medio del conflicto.
Según lo comenta TyC Sports en su portal deportivo, antes de que pueda iniciar la segunda etapa en el Parque de la Independencia, los insultos entre las parcialidades inició en el primer tiempo y cuando estaba por comenzar el complemento escaló al lanzamiento de proyectiles de un lado a otro, con los jugadores de ambos lados buscando calmar a sus respectivos hinchas para poder iniciar el juego.
LA BARRA DE BOCA ROMPIÓ EL PORTÓN y se metió en la platea con intenciones de confrontar con la hinchada de #Gimnasia y hay incidentes con la policía. pic.twitter.com/fxdtLtGGmH
Mientras la situación no dejaba de escalar, se vio como Martín Fernández se acercó al alambrado de la popular de Gimnasia ya no para pedir calma sino para intentar ayudar a desatar una bandera, ya que parecía inevitable una pelea entre las barras y buscaban guardar "los trapos", el más preciado de los trofeos de guerra en este tipo de contiendas.
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Accionar de precaución con la bandera que estaban a mano que también sucedió en la tribuna Xeneize aunque sin la participación de ningún jugador para agilizar la situación.
Pese a los mejores intentos de los jugadores, la calma lejos estuvo de llegar y la situación empeoró con el arribo de la barra brava del Club de la Ribera, que logró pasar de la popular a la platea donde se generó el conflicto.
Para evitar que la parcialidad Xeneize se acerque a la platea del Lobo, la policía formó un cordón y reprimió con gases lacrimógenos como también con balas de goma; un tenso episodio que dejó graves secuelas y afectó más que nada a la hinchada platense -por el efecto de los gases que llegaba a su tribuna por el viento- que la barra brava boquense.
Lo que finalmente trajo la calma fue la aparición del presidente Juan Román Riquelme junto a otros integrantes del Consejo de Fútbol como Raúl Cascini, Marcelo Delgado y Mauricio "Chicho" Serna; que lograron convencer a los hinchas de cesar los embates.
Esa aparición de Riquelme logró el objetivo de calmar las aguas y finalmente la barra brava de Boca volvió como si nada hubiera pasado a su lugar en el corazón de la cabecera de la tribuna popular local Diego Armando Maradona.
Tras varios minutos a la espera del visto bueno de la seguridad, Jorge Baliño dio la orden y comenzó -tras casi media hora de espera- el complemento del juego.