El futbolista Luciano Cabral está detenido por el crimen de Joan Villegas (26), hecho ocurrido el 1 de enero en Genaral Alvear, y su abogado defensor pidió del sobreseimiento para desvincularlo del caso que también tiene a su padre y a un chico de 18 años tras las rejas.
"Yo no soy ningún asesino, no maté a nadie, solo quiero jugar al fútbol. Y si me dan la libertad no me voy a fugar", le dijo Cabral a las autoridades judiciales, que hoy las 18 darán un veredicto sobre el caso.
Cabral está preso desde hace más de dos meses en la cárcel de San Rafael acusado de homicidio agravado. En las próximas horas, su situación podría cambiar de rumbo gracias a la intervención de Argentinos Juniors, club dueño de su pase y que se presentó en las últimas horas como garante para que el acusado recupere la libertad.
El homicidio ocurrió el 1 de enero cuando Villegas fue econtrado sin vida y con signos de haber sido atacado con piedras en calle Chacabuco. Luego, detuvieron al padre de Luciano Cabral, Oscar y Axel Olguín (18). Por último, cayó el jugar que se desempeña actualmente en Atlético Paranaense de Brasil.