Hace tiempo que la baja rentabilidad está golpeando a los comercios, y esta situación ha llevado a que varios negocios cierren sus puertas o se trasladen a otro lugar. Desde el sector inmobiliario señalaron que en los últimos meses se ha incrementado la cantidad de locales vacios en el centro mendocino.
A lo largo de la Avenida San Martín partiendo desde Colón hacia el Norte, como en las calles Lavalle, Salta, Rioja y Vicente Zapata, entre otras, los inmuebles desocupados ya son parte del paisaje.
No es que los alquileres hayan subido, sino que bajó el poder adquisitivo de la gente, señaló a SITIO ANDINO, Santiago Debé, titular del Colegio de Corredores Públicos Inmobiliarios de la provincia.
El representante de los inmobiliarios explicó que al disminuir el poder de compra, el consumo se resintió y por ende la cantidad de ventas, lo que llevó a los comercios a experimentar una baja rentabilidad.
El problema más serio es que ya no tenemos el consumo que teníamos antes, y los más perjudicados son los pequeños y medianos comerciantes, dijo el inmobiliario.
Es por esta situación que en estos últimos meses ha crecido la cantidad de locales vacíos en el centro.
Se están yendo porque no pueden perdurar en el inmueble, comentó Debé, quien agregó que a la baja rentabilidad se le suma la presión impositiva nacional, provincial y municipal que existe sobre los comercios.
Ante este panorama negativo, desde el sector indicaron que varios propietarios han decidido conservar a su inquilino y están pactando las nuevas tarifas por debajo de la inflación real.
Prefieren eso antes de tener el local tres meses o más sin alquilar, señalaron.