La canciller alemana, Angela Merkel, instó a los 3,6 millones de jóvenes desempleados en la eurozona a salir de sus países para encontrar un puesto de trabajo, no obstante consideró injusto que "deban pagar los platos rotos" de esta crisis.
La canciller alemana, Angela Merkel, instó a los 3,6 millones de jóvenes desempleados en la eurozona a salir de sus países para encontrar un puesto de trabajo, no obstante consideró injusto que "deban pagar los platos rotos" de esta crisis.
En una entrevista a la televisión británica que reprodujo Europa Press, la canciller subrayó que el nivel de desempleo en países como Grecia o España representa una "enorme crisis", pero insistió al mismo tiempo en su defensa del control estricto del gasto.
En este sentido, recordó que cuando el desempleo se disparó entre los jóvenes de Alemania, muchos de ellos sólo encontraron trabajo "porque se mudaron al Sur". "Tendría que haber más movilidad", remarcó.
Merkel también consideró "injusto" que sean los jóvenes quienes tengan que "pagar los platos ratos", por lo que no se hizo en su momento. "Pero no hay manera de evitarlo. Tenemos que fabricar productos u ofrecer servicios en Europa que podamos vender", agregó.
No obstante, sostuvo que la política aplicada durante la crisis fue en conjunto "correcta", y resaltó que la cuestión no es la austeridad, sino "cómo volver al crecimiento". "En lo que respecta al empleo y el crecimiento, la eurozona y otros países están en una situación complicada", admitió.
Al respecto, señaló que la política de equilibrio presupuestario se ha aplicado con "flexibilidad". "Los países europeos estuvieron de acuerdo en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento, pero sin embargo, hemos dejado que muchos países tengan la posibilidad de tener un déficit por encima del 3 por ciento. Francia, por ejemplo, pero también España y Portugal", añadió.
Merkel dijo además que las políticas acordadas para economías como la griega o la española no fueron una idea propia suya, sino que fueron acordadas entre la "troika", que integran la Comisión Europea (CE), el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Fuente: Télam.