Para los ex radicales K, la última fue una década desaprovechada
Supieron formar parte de las filas oficialistas, pero ahora son los más acérrimos opositores. Opinan que el kirchnerismo es un juego que suma cero y, si bien no se arrepienten, reniegan de su pasado K.
Si bien al cumplirse 10 años desde la asunción de Néstor Kirchner en la presidencia de la nación los bombos y platillos sonarán sólo en manos de militantes peronistas, hay sectores que durante esta última década ganada participaron del modelo, aunque ahora estén en la vereda contraria.
Es el caso de un sector del radicalismo, desde donde tras la figura de Julio Cobos y su sector se acercaron al kirchnerismo para llegar a la vicepresidencia y retener la gobernación provincia en 2007 (algo que no consiguieron), y aunque el final de la novela es de público conocimiento, su pasado K los condena a opinar sobre los vaivenes de la última década.
Así, los ex radicales K y hoy acérrimos opositores destacan que la que pasó fue una década desaprovechada, donde el gobierno no logró convertir el crecimiento económico en desarrollo y todo lo que se progresó en los primeros 5 años se destruyó en los siguientes.
Julio Cobos, pre candidato a diputado nacional, ex vicepresidente de Cristina Fernández y gobernador de Mendoza durante la presidencia de Néstor Kirchner
Sin dudas, cuando en Mendoza se habla de ex radicales K la primera persona que sale a la luz en la memoria colectiva es Julio Cobos, quien supo abrazar con fuerza la causa K, acercarse a Néstor y Cristina a más no poder y luego rompió relaciones con la pareja que ostentaba el poder.
En lo institucional se ha retrocedido mucho. Los ataques contra la Justicia, la libertad de expresión, son temas en los que no se progresó, todo lo contrario. Lo mismo sucede con el federalismo nacional, ha quedado reducido a cero para los gobiernos oficialistas, todo se decide en Buenos Aires, destacó, en diálogo con este medio, el ex vicepresidente kirchnerista.
No niego que haya habido avances, pero los retrocesos y la división de la sociedad fueron más fuertes y marcados. Para mí es una década desaprovechada, donde las condiciones estaban dadas para acomodarnos en el mundo, algo que no pasó, resaltó Cobos.
Sobre su pasado, Cobos aseguró no estar arrepentido de los acuerdos que se realizaron con el kirchnerismo en 2007, aunque destacó que de haber sabido que el rumbo se torcería drásticamente y se daría un giro tan grande en la política económica, me lo hubiese replanteado.
Creí que el 2007 era el comienzo de una concertación amplia, donde las decisiones sobre temas fundamentales para el país se tomarían siempre bajo el consenso mutuo, pero no fue así. Igualmente, estoy tranquilo porque actué de buena fe, finalizó el ahora candidato al Congreso, pero por el radicalismo anti K.
Cesar Biffi, actual senador provincial, ex candidato a la gobernación por la Concertación que unió a kirchneristas y radicales.
Por su parte, otro de los máximos exponentes del radicalismo K durante 2007 fue el actual senador Cesar Biffi, quien supo ser candidato a gobernador (perdió con Celso Jaque) y fue uno de los más críticos con el gobierno nacional.
El kirchnerismo resultó ser un juego de suma 0, que progresó en los primeros años y tiró todo a la basura después. Todo lo que ganamos después se perdió, aseveró Biffi.
Desapareció el superávit fiscal, el tipo de cambio está atrasado y complica a las industrias, las reservas han disminuido notablemente, lo que se progresó en empleo se lo comió el impuesto a las Ganancias y lo que se avanzó en pobreza se atrasó con la inflación, destacó Biffi a SITIO ANDINO.
Sin embargo, Biffi es otro de los que no reniega de su pasado K: Creíamos que se iban a seguir los lineamientos macroeconómicos de los primeros años, por eso participamos en ese modelo y no nos arrepentimos. Además, era un momento de crisis partidario, recordó el legislador.
Yo no tengo vergüenza de decir que estuve en el kirchnerismo, los radicales somos radicales con toda nuestra historia a cuestas, no tenemos esa extraña y reprochable virtud que tienen los peronistas de olvidarse del pasado, disparó Biffi.
Juan Carlos Jaliff, ex vicegobernador durante el gobierno K de Cobos y mano derecha del ex vicepresidente.
Finalmente, el último eslabón del triunvirato de radicales K que llevaron al radicalismo mendocino a aliarse con el kirchnerismo y luego rompieron drásticamente fue el actual senador Juan Carlos Jaliff, quien supo ser vicegobernador de Cobos durante el coqueteo con Néstor y Cristina Kirchner.
Así, en un canal similar al de Cobos y Biffi, Jaliff destacó que la década que pasó fue desaprovechada y, aunque admitió algunos avances, opinó que luego del conflicto con el campo por la resolución 125 el modelo kirchnerista cambió el rumbo.
Arrancamos muy bien, pero después los errores y desaciertos nos hicieron perder oportunidades inmejorables. Los fondos de la Anses, por ejemplo, son utilizado para todo menos para mejorar la calidad de vida de los jubilados, opinó el legislador.
Además, Jaliff opinó que la clave del declive del kirchnerismo fue la deficiente política energética que, según sus estimaciones, llegó al país a tener que importar más de 10 mil millones de dólares.
Finalmente, sobre su paso por las filas K Jaliff prefirió minimizar el romance con el gobierno nacional al destacar que lo nuestro con el kirchnerismo realmente duró muy poco, a partir de 2008 notamos un cambio negativo en la forma de tomar decisiones y en las políticas claves para el país, por eso nos alejamos.