En el marco de la mega causa por coimas en la justicia federal, el fiscal Dante Vega imputó hoy a dos de los hijos del juez federal Walter Bento, investigado por liderar una supuesta asociación ilícita que tenía como objetivo pedir coimas a imputados a cambio de beneficios.
La acusación cayó sobre las espaldas de Nahuel Agustín y Luciano Ezequiel Bento -ambos empleados judiciales-, quienes fueron señalados por "lavado de activos de origen ilícito".
Además, el fiscal ordenó la prohibición de salida del país para los dos sospechosos, en tanto que requirió la retención de sus documentos de viaje.
Según reza la imputación, los hermanos Bento fueron señalados por "haber puesto en circulación fondos de procedencia ilícita, al adquirir bienes, muebles e inmuebles registrables, como así también realizar inversiones en fideicomisos inmobiliarios y numerosos viajes al exterior".
Los detectives afirmaron que los acusados intentaron "dar apariencia de legalidad al producido de la maniobra ilícita investigada, mediante su incorporación al sistema económico formal".
La imputación, notificada este jueves, sorprendió a más de uno. Es que los hijos del juez investigado son empleados judiciales y tienen un sueldo elevado -uno de ellos es Secretario de Cámara-, por lo que ahora se deberá analizar la pericia contable para determinar la forma en la que adquirieron los distintos bienes cuestionados. Fuentes judiciales afirmaron que "no será fácil demostrar el supuesto ardid".
La acusación, en detalle
Según la imputación, Nahuel fue señalado por adquirir tres inmuebles (un departamento, una cochera y una baulera), como así también distintos autos y locales comerciales.
En la acusación, los detectives destacaron que el acusado compró con activos ilícitos un Renault Clío 1.2, modelo 2006, a $46.000; un Ford Fiesta Kinetic modelo 2012 a $96.000 (en el 2012); un Audio A3 cero kilómetro a $320.000 y un Audio S3 modelo 2017 a $890.000.
A esto se le suma algunos locales en calle Ozamis Sur de Maipú.
Por su parte, a Luciano lo investigarán por la adquisición de tres inmuebles y por distintas transacciones en la compra de vehículos.
La investigación de Vega indica que el hombre adquirió y vendió un Ford Fiesta Kinetic modelo 2012; también un Audi A1 cero kilómetro, el cual compró en diciembre del 2013 a $204.782 y luego entregó, en el 2018, en $390.000.
Además, los sabuesos pusieron la lupa en la compra de un BMW modelo 2017, que fue comprado en $590.000 y luego vendido en $2.250.000 (en junio del 2020), como así también la compra de un Audi A3, días después de la entrega del coche anterior, en $1.220.000.
La mega causa por coimas que instruye el fiscal Vega tenía hasta hoy a 24 personas procesadas por distintos delitos, entre ellos, asociación ilícita, lavado de activos y cochecho.
Mientras que semanas atrás se dictó la falta de mérito y liberación para algunos de los sospechosos, ahora la pesquisa se inclinará a estos dos nuevos posibles partícipes del ardid mencionado.