Carina Di Marco fue procesada con prisión preventiva y enviada al Servicio Penitenciario Provincial de San Luis este jueves pasado el mediodía, acusada de ser partícipe en los abusos de su hija, Florencia Di Marco, quien luego fue asesinada.
Carina Di Marco fue procesada con prisión preventiva y enviada al Servicio Penitenciario Provincial de San Luis este jueves pasado el mediodía, acusada de ser partícipe en los abusos de su hija, Florencia Di Marco, quien luego fue asesinada.
La jueza Virginia Palacios la consideró partícipe necesario del delito de "abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo, por la calidad de guardador y por el aprovechamiento de la situación de convivencia preexistente". La madre no dijo nada cuando fue notificada del procesamiento.
Su defensora Carina Martelli no descartó que próximamente soliciten la prisión domiciliaria, dado que la mujer tuvo un bebé hace poco y tiene tan solo unos días de vida, tal como informó el Diario de la República de San Luis.
Sin embargo, sobre la posibilidad de que el infante acompañe la madre en el Servicio Penitenciario, la acusada habría pedido que mientras este en la cárcel, eso no suceda.
Mientras los hijos de Carina quedaron bajo el resguardo del tío Cristian Di Marco, por lo dispuesto por la jueza de Familia y Menores Nº 2 Viviana Oste.
"Están acreditados los abusos sexuales, practicados por forenses y pericias de laboratorios científicos, con hallazgo de semen", comentó la jueza Virginia Palacios. "Me resulta inentendible que la madre, por los signos de abuso detectados, no haya sabido de ellos", remarcó.
La magistrada además sostuvo que fueron fundamentales las declaraciones de dos maestras de Florencia cuando vivían en Palmira. "Se sabía abiertamente que Florencia era abusada. Las maestras la convocaron a la madre a una reunión, para informarle de esto", apuntó.
Otros testimonios que tomó en cuenta la jueza fueron los de entorno familiar de los Di Marco. Puntualmente de la madre de Lucas Gómez y del padre de Carina.
"La señora manifestó que había actitudes que no le gustaban tanto de su hijo como de Carina. La madre le decía constantemente a la niña ´prostituta´. La hacían entrar al baño para acercarle las toallas al padrastro. A veces se quedaba un tiempo allí", describió Palacios.
El abuelo materno dijo que su nieta varias veces le manifestó que le movían la cama,que sentía una presencia por las noches, pero que cada vez que se levantaba la niña no veía nada.
"La investigación no esta cerrada", aseguró la jueza. Se pidió una copia de los expedientes de la Escuela Florencio Ameghino, donde asistía la niña, con el fin de establecer responsabilidades en los docentes que detectaron los abusos de Florencia.
Fuente: Diario de la República