El Carrusel como vidriera política: Scioli, Capitanich, Macri y Cobos, presentes
Como hace muchos años no pasaba los máximos pre-candidatos a suceder a Cristina Kirchner estuvieron en la Vendimia. Francisco Pérez tuvo guardaespaldas de lujo y los opositores no subieron al palco oficial.
Año tras año el Carrusel vendimial sirve como vidriera para los políticos locales y nacionales. Este 2014 no fue la excepción y, como pocas veces pasó, todos los precandidatos a la presidencia de la Nación en 2015 dijeron presente e intentaron interactuar con el público, los medios y los empresarios para mostrarse. Oficialistas y opositores estuvieron en la vereda de enfrente y hasta evitaron nombrarse.
Así, tanto el jefe de Gabinete de Ministros de la Nación y máximo vocero de la presidenta, Jorge Capitanich, como el gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli, fueron los guardaespaldas del Lujo de Francisco Pérez. Los funcionarios nacionales se sentaron junto al primer mandatario de Mendoza, interactuaron con él en todo momento y no lo dejaron sólo ni cuando las manifestaciones de viñateros lo hicieron transpirar.
Viñateros le entregaron un petitorio a Pérez y Capitanich se mostró interesado en la problemática.
Además de Scioli y Capitanich otros funcionarios de primera línea del gobierno nacional también se apostaron en el palco oficial: el presidente de Aerolíneas Argentinas, Héctor Recalde, el secretario de Deportes, Camau Espínola y el diputado nacional por Buenos Aires, Martín Insaurralde, entre otros. Además, otros gobernadores como José Manuel De La Sota también estuvieron en el palco oficial.
A la hora de las declaraciones Francisco Pérez habló fuerte de la unidad del Frente para la Victoria y dijo que la gran presencia de figuras del ámbito nacional y provincial es un mensaje para la sociedad y para los peronistas de que tenemos que estar más unidos que nunca. Durante todo el Carrusel el primer mandatario estuvo exuberante, se sacó fotos con todos y jugó a repartir los regalos entre todos los invitados del palco oficial con una sonrisa de oreja a oreja.
Por su parte, Daniel Sicoli hizo hincapié en la Economía nacional y aseguró que está estabilizada. Las reservas del Banco Central dejaron de bajar, la inflación se está desacelerando. Esto es para los que habían presagiado un panorama pesimista para el resto del año. Vamos a salir adelante, dijo el gobernador de Buenos Aires. Sin embargo, al ser consultado por SITIO ANDINO el funcionario negó que ya sea candidato a la presidencia: hoy soy el gobernador de Buenos Aires, mañana veremos donde me encuentra la política. No son tiempos para lanzarse, resaltó.
Insaurralde es uno de los funcionarios nacionales que "cuidó" a Pérez en el palco oficial.
Desde el punto de vista de la política mendocina, llamó la atención que los diferentes sectores del peronismo se mezclaron y no se notó una división entre la Corriente Peronista y el sector Azul. Un grupo de intendentes se sentó atrás de Pérez y otro, menos numeroso, se acomodó junto con los diputados nacionales Anabel Fernández Sagasti, Alejandro Abraham y Dante González en un rincón del palco.
En cuanto a la oposición los exponentes también dijeron presente, pero no se subieron al palco oficial y estuvieron en todo momento en la vereda de enfrente del kirchnerismo. Así tanto Mauricio Macri como Julio Cobos, Pino Solanas y Ernesto Sanz, entre otros, decidieron quedarse detrás del escenario oficial y no se mezclaron en ningún momento con los peronistas.
No subo al palco oficial porque no me invitaron, aunque tampoco pedí que me inviten. Hoy soy un mendocino más que quiere hablar con la gente y los empresarios, no sacarme fotos, resaltó Mauricio Macri en el interior del hotel Hyatt. Además, el jefe de Gobierno de Capital Federal criticó el intento de reformar el código penal y asegurar que no es momento, la gente quiere Seguridad.
Macri no fue invitado a subir al palco oficial, pero no se molestó. "Si me invitaban tampoco iba", resaltó
En cuanto a los políticos opositores de Mendoza la decisión que tomaron fue similar a la de sus pares nacionales. Sólo la diputada Patricia Giménez ocupó un lugar en el palco y se la vio dialogando en repetidas oportunidades con miembros del Ejecutivo provincial. El resto, entre los que estuvieron Alfredo Cornejo, Roberto Pradines y Juan Carlos Jaliff, prefirieron hacer base en el hotel Hyatt y desde ahí criticar al Gobierno provincial y nacional.
De esta manera la Vendimia 2014 quedará en la historia por ser la más política desde la vuelta de la democracia y la que sirvió para que la oposición y el oficialismo mostraran a sus candidatos a la presidencia de cara a 2015. El PJ se mostró unido como hace tiempo no se lo veía y la oposición, curiosamente, también se juntó tras bambalinas.