El triunfador de Gran Hermano, Marcos Ginocchio, abrió su corazón y contó el problema que enfrentó durante su adolescencia. “Me sentía en un pozo del que no podía salir”, confesó.
El triunfador de Gran Hermano, Marcos Ginocchio, abrió su corazón y contó el problema que enfrentó durante su adolescencia. “Me sentía en un pozo del que no podía salir”, confesó.
El joven de Salta se mostró sensible al tema durante su estancia en la casa más famosa del país y llegó a hablar de ello con La Tora o Camila, aunque nunca con tanto detalle y sin entrar en muchos detalles.
Después de ganar el concurso, Marcos decidió hablar sobre lo que le sucedió a los 14 años: “Hubo una etapa de mi vida que no estaba bien, para nada bien, me sentía en un pozo del que no podía salir”.
“Fue un poco antes de la separación de mis padres”, situó el joven en el tiempo, quien agregó: “Sentía que no podía salir con nada, que cada vez que estaba llegando al final del túnel, caía de vuelta”.
Marcos se sinceró y dijo que “no me di cuenta” de lo que estaba pasando y de lo grave que era, por lo que “no pedía ayuda”. En ese sentido, el deporte fue su cable a tierra para salir adelante, el cual consideró que lo ayudó “mucho”.
“Me hice muy creyente y me aferré a Dios. Sin él no hubiese salido nunca de ese pozo. Se lo agradezco y se lo voy a agradecer siempre, porque me señalizó el camino”, concluyó en el programa especial de Gran Hermano 2022, que se transmitió en Telefe, después del final del reality.