Un alumno de la escuela Marcelino Blanco de La Paz relató en primera persona lo que vivió durante el ataque protagonizado este miércoles por una estudiante de 14 años que ingresó al establecimiento con una pistola 9 milímetros.
Un compañero de la escuela Marcelino Blanco contó que la menor apuntó a alumnos, y reclamaba a docentes y estudiantes que la hostigaban. Escuchá el audio.
Un alumno de la escuela Marcelino Blanco de La Paz relató en primera persona lo que vivió durante el ataque protagonizado este miércoles por una estudiante de 14 años que ingresó al establecimiento con una pistola 9 milímetros.
El chico recordó que apenas salió de la dirección se topó con la adolescente armada: “Le avisé a una preceptora, pero no me creyó. Después escuché un tiro y corrí al curso”, señaló.
Según su testimonio, la alumna ingresó a las aulas y apuntó a compañeros, al tiempo que exigía que entregaran a quienes buscaba. “Dijo que quería a una profesora, que supuestamente la había reprobado, y a dos compañeros porque le hacían bullying”, aseguró.
El menor indicó que la joven pidió en reiteradas ocasiones que le entregaran a esas tres personas. “Ella decía que iba a matar (a la docente) y después se entregaba”, recordó.
El ataque provocó pánico en la comunidad educativa. La Policía evacuó la escuela y trasladó a los alumnos al hospital departamental, donde fueron atendidos por crisis nerviosas. Lo propio ocurrió con la docente buscada por la joven, quien se había escondido en un aula, y sus colegas.
Uno de los momentos más críticos fue cuando la adolescente disparó frente a los efectivos que intentaban convencerla de que depusiera su accionar. “Yo escuché cinco tiros (la información oficial indicó que fueron tres). Todos nos escondimos como pudimos”, relató el testigo.
Un escuadrón del Grupo de Resolución de Incidentes y Secuestros (GRIS), junto a efectivos policiales y bajo la supervisión de la fiscal penal de menores de La Paz, Griselda Digier, intervino en el operativo. Tras cinco horas de negociación, la adolescente depuso la actitud y entregó el arma.
De acuerdo con la versión del compañero, la chica era conocida por ser “calladita y tranquila”, aunque en la escuela se hablaba de que sufría bullying y problemas con algunas materias, en particular con una profesora de Matemáticas que la había desaprobado.
El caso continúa bajo investigación judicial. La adolescente permanece internada y bajo custodia, mientras los equipos de seguridad y educación analizan lo ocurrido. El viernes se realizará una jornada de reflexión institucional, sin asistencia obligatoria, con el acompañamiento de los equipos interdisciplinarios y psicopedagógicos de la DGE.