La suspensión del juez federal de Mendoza Walter Bento, votada por unanimidad por el plenario del Consejo de la Magistratura, no sólo generó un sismo en tribunales, sino que también acarrea un fuerte impacto político.
La suspensión del juez federal de Mendoza Walter Bento, votada por unanimidad por el plenario del Consejo de la Magistratura, no sólo generó un sismo en tribunales, sino que también acarrea un fuerte impacto político.
Es que desde que asumió en 2005, el titular del Juzgado Federal Nº 1 es el encargado de la organización de las elecciones nacionales en la Provincia. A partir de esta sanción, que podría devenir directamente en la destitución vía Jury de enjuiciamiento, el magistrado pierde la competencia electoral que ostentaba. Por lo tanto, no será el responsable del control y preparación de las PASO del 13 de agosto y las generales del 22 del octubre.
La incógnita, entonces, se centra en quién suplirá al juez en sus funciones, tanto en el ámbito penal como electoral. En el primero, entra en juego la Ley de Subrogancias, por lo tanto no hay mucho misterio. Naturalmente, la designación le corresponde al titular del Juzgado Nº 3, Marcelo Garnica, quien tiene competencia penal. Justamente un funcionario que supo trabajar codo a codo con Bento, cuando fue secretario de su juzgado.
En cuanto a la responsabilidad electoral, hay algunos indicios. El juzgado de Garnica tiene a su cargo dos secretarías (la “D” y “E”) y sumará las cuatro que gestionó -hasta hoy- Bento: la “A”, “B”, “C” y “F”. Este recargo de labores en el magistrado podría determinar que la Cámara Nacional Electoral opte por la subrogancia de un juez civil de la jurisdicción. Allí aparece la figura de Pablo Quirós, titular del Juzgado Nº 2. Otra alternativa, menos probable, es que se designe a Susana Pravata, con competencia tributaria y previsional (Juzgado Nº 4).
“Se está trabajando en todas las resoluciones que corresponden para asegurar la continuidad sin ningún tipo de dilaciones de la prestación del servicio de justicia del Juzgado Federal N°1 de Mendoza, que además tiene la competencia electoral”, aclararon -ante la consulta de este medio- fuentes de la Justicia Federal.
En el caso que el juicio político decida la destitución, se abrirá una vacante cuya ocupación deberá cumplir con el proceso previsto en la Constitución Nacional: el presidente nombrará al nuevo magistrado, que saldrá de una terna propuesta por el Consejo de la Magistratura, previo acuerdo del Senado (mayoría simple).
Que Garnica subrogará a Bento en sus funciones penales es un hecho. Restará definir si también lo hará en materia electoral o si la responsabilidad la asume otro de sus colegas. La respuesta oficial se conocerá en lo que resta de esta semana.