El mercado de televisores premium busca despegar en el país, aun cuando sólo hay pocas marcas que los ofrecen y luchan por la evangelización de los usuarios.
En 2010, llegó la nueva generación de televisores con funciones smart y en 3D y que pretendieron cambiar la forma de ver contenidos audiovisuales. Sin embargo, dos años más tarde, todavía son un producto aspiracional, donde las prestaciones no terminan de ser adoptadas por los usuarios. Tanto los analistas del mercado como propias empresas fabricantes coinciden en que falta evangelizar sobre esta televisión "inteligente" y sus contenidos para que logren convivir con el broadcasting tradicional.
Enrique Carrier, director de la consultora Carrier y Asociados, explica: "Si bien se están vendiendo bien estos equipos, la elección de compra está más encaminada por ser un televisor de avanzada a sus capacidades". Y agrega: "Esto se debe a en que la televisión no es el mejor dispositivo para la navegación web, ya que se trata de una acción privada, que aún convive mejor en otros equipos".
Desde el lado de los fabricantes, los responsables del sector se esfuerzan por tratar de hacerle entender al consumidor que el concepto va más allá de la simple idea de habilitar la navegación web. La surcoreana LG lo define como la posibilidad de ver la capacidad multimedia de manera integrada con contenido emitido, on-demand, navegación y aplicaciones a través de Internet.
En esa sintonía, Solange Geuna, CE Marketing Manager de Samsung Argentina, define que "un televisor para que sea considerado smart debe tener conectividad, que puede ser a Internet o para acceder al contenido de otros dispositivos". El comentario hace referencia a la posibilidad de ver, en el televisor, las fotos almacenadas en una cámara de fotos o las películas guardadas en la notebook. Todo, a través de la tecnología Digital Living Network Alliance (DNLA), que permite interconectar a distintos dispositivos en una red.
Cifras positivas
Claro está que el crecimiento en el segmento es exponencial dado que, hace apenas dos años, ni siquiera se cuantificaban. En esta sintonía, desde Sony, reconocen que el mercado argentino de televisores smart creció de 2010 a 2011, un 600%, alcanzando las 210.000 unidades vendidas. "Se espera que la curva se mantenga en 2012 cerca del 180%, frente al año anterior, amplía Ezequiel Brusco, jefe de Producto Bravia para la filial argentina.
En tanto, para Philips Argentina, los Smart TV representaron un 10%, sobre el total de TV's de pantalla plana vendidas en 2011. Para este año, la expectativa es que superen el 35%, según datos de Ariel Bruzzone, director de Marketing de Philips Televisión.
La tendencia se repite a escala global. Jürgen Boyny, director Global de la investigadora de mercado internacional GfK Retail and Technology, anticipó recientemente que, para los equipos 3D se registra, desde enero, una tasa de crecimiento superior a la del segundo semestre de 2011, alcanzando el 122%. Mientras, "para los LED smart, es probable que se sitúe en alrededor del 56% este año", dijo. En tanto, la firma de investigación IHS iSuppli estima que el mercado global de los Smart TV crecerá cerca de 60% este año. Con 95 millones de unidades, superará al mercado de televisores en general, para el que se espera un ritmo de crecimiento de un 2%.
Barreras y evangelización No obstante, aunque las predicciones sean favorables, los esfuerzos de las principales marcas de ganar en la batalla de las pantallas distan mucho de la realidad. Con sólo hacer un recorrido, un comprador experimentado puede darse cuenta de que los propios agentes de ventas no logran persuadir para que la burbuja se expanda. Concentran el mensaje principalmente en el acceso a Internet, destacando como valor agregado el acceso a redes sociales -YouTube, Facebook, Twitter- o la posibilidad de acceder de forma simple a los contenidos on-demand.