Ya sobre los límites de un 2018 para el olvido, noviembre dejó datos positivos para la vitivinicultura. Es que al boom de los graneles y la recuperación del mosto vendido al exterior, las exportaciones de vinos fraccionados pegaron un salto y crecieron 5,9% contra noviembre de 2017, según el último informe de "adelanto" del Instituto Nacional de Vitivinicultura.
El crecimiento de noviembre en las exportaciones de vinos fraccionados no alcanza a reponer la caída que se acumula en los primeros 11 meses de 2018 (-2,9%), pero sí es un cambio de tendencia en relación a los meses anteriores. Recordemos que para encontrar un dato positivo en exportaciones de vinos fraccionados hay que retrotraerse a julio de este año. Desde ese mes, fue todo caída y la duda ahora es si esta recuperación (ya que no hay crecimiento real sino más bien un recorte de pérdidas en el balance del año) se va a mantener y consolidar en el tiempo a partir de las ventajas cambiarias que hoy tiene el sector a partir de la devaluación y un dólar en torno a los $38.