VPH: la causa principal de un cáncer que provoca 60 muertes al año en Mendoza
En las mujeres, el Virus del Papiloma Humano es frecuentemente responsable del cáncer de cuello de útero que causa 60 muertes al año en Mendoza. Cómo prevenir.
El Virus del Papiloma Humano, principal responsable del cáncer de cuello de útero.
Este 4 de marzo fue el Día Internacional de la Concientización sobre el Virus del Papiloma Humano (VPH o HPV). Si bien no es la única causa, es uno de los factores principales en la incidencia de casos de cáncer de cuello de útero en Mendoza, el país y el mundo. La importancia de los controles y del uso del preservativo como medidas clave de prevención.
El VPH afecta tanto a hombres como a mujeres pero representa más riesgos para un género que para el otro. A nivel mundial, el 80% de la población ha tomado contacto con algún subtipo de este virus que frecuentemente es el causante del cáncer de cuello de útero, enfermedad que causa 1.500 muertes en Argentina por año. Se transmite por contacto sexual y el uso correcto del preservativo así como los controles ginecológicos anuales son las medidas de prevención más efectivas, así como la vacunación implementada como obligatoria para niñas y niños de 14 años.
“En promedio, en Mendoza se detectan 250 casos de cáncer de cuello por año y 60 mujeres mueren por esta causa anualmente. Hay muchos subtipos dentro del VPH. Sin embargo, los que siempre han estado más relacionados al desarrollo de esta enfermedad son el 16 y el 18, vinculados con las lesiones más malignas. Sin embargo, se trata de ampliar la cobertura porque si bien algunos no tienen relación directa con este tipo de cáncer, sí son responsables de la aparición de lesiones benignas como las verrugas, por ejemplo, por lo que siempre es bueno prevenirlas en conjunto con otras medidas de salud sexual y la vacunación”, explicó Valentina Albornoz, jefa del programa provincial de Salud Reproductiva de la provincia.
“El preservativo es el único método capaz de prevenir infecciones de transmisión sexual (ITS), incluido el VPH, no atraviesa el látex. Por este motivo, se hace mucho hincapié en el buen uso del preservativo. En todo momento del acto sexual tenemos predisposición al contagio por lo que condón siempre es bueno y es el único método efectivo contra el cáncer de cuello uterino y contra cualquier otra ITS, si se utiliza de la manera adecuada”, agregó la profesional.
En mujeres pero también en los varones
Si bien el VPH puede poner en riesgo la vida de las mujeres, el varón también puede contagiarse y aunque los casos de cáncer de pene y ano relacionados con este virus, son muy poco frecuentes en las personas, el varón cumple un rol importante en la prevención.
“Si tomó contacto con alguno de estos subtipos peligrosos puede actuar como portador del VPH y contagiarlo a su compañera sexual aún sin haber presentado ningún tipo de síntoma, eso es lo más peligroso. No les produce los mismos síntomas ni tienen riesgo de cáncer de cuello de útero obviamente pero el peligro de contagio es el mismo y pueden transportarlo aún sin saberlo”, señaló Albornoz.
En el caso de las mujeres, la presencia de este virus se puede detectar en los controles ginecológicos que se recomiendan realizar una vez al año. “A través del papanicolau (o pap) y del test de VPH, podemos saberlo. El pap es el estudio anual que siempre se usó para identificar lesiones pre cancerosas. Ahora bien, si tenemos más de 30 años, podemos solicitar al ginecólogo/a un test de VPH aunque, generalmente, en todos los centros de salud se hace espontáneamente junto con el pap”, agregó la ginecóloga.
Las lesiones pequeñas se pueden tratar con mayor facilidad por lo que ser rigurosas con los controles anuales es muy importante. “Estamos pensando en una infección que puede tardar un año en evolucionar y si hoy estamos sanas, en un año, si me detectan una lesión probablemente, haya avanzado muy poco independientemente del tipo de virus que tenga, de allí la importancia de los controles. La tasa de curación en etapas precoces se replica, más aún en los que tenemos un método de detección”, resaltó Albornoz.
Y concluyó: “En 10 años ha disminuido la incidencia de cáncer de cuello de útero a nivel nacional. La vacunación es contra los subtipos que pueden llegar a causar lesiones malignas, entonces, ese es el indicador final que miramos. Ha habido una baja por lo que estamos tratando de fortalecer otras estrategias para sostener esa baja e incluso extinguirla porque es una patología que no debería existir”.