Día de Muertos: contrastes en la visión de la muerte entre Argentina y México
Nos comunicamos con la licenciada en psicología Belén Riccio para entender cómo es el proceso para volver a la cotidianidad después de perder a un ser querido.
Día de Muertos: las diferentes concepciones de enfrentar la muerte en Argentina y México, según la psicología.
El Día de Muertos es una festividad oriunda de México, pero que se fue popularizando en otros lugares del mundo llegando, también, a la Argentina. Mientras que en el país del norte se celebra la vida y honra la memoria de aquellos que partieron, en nuestro país la realidad es otra.
La licenciada en psicología Belén Riccio analizó cómo se vive el fallecimiento de alguien cercano en nuestra cultura, tan diferente a como la viven en México: "Allá conmemoran el Día de Muertos, se hace una fiesta, se celebra con comidas, con recuerdos, tienen varios rituales para recordar a aquellas personas que no están, pero desde la alegría, por eso hacen fiestas".
"Nosotros, los argentinos, tenemos también rituales para nuestros duelos, pero están más ligados a la nostalgia, a la tristeza, a la angustia que genera el recuerdo de la persona fallecida. La muerte en Argentina se vive de una manera más bien triste, nos aferramos mucho a los recuerdos de las personas que ya no están. Se vive como el fin de la vida y no como una etapa más de la vida en sí misma", hondó en su observación.
Hay una creencia que dice que la persona va a un determinado lugar por las acciones que hizo en vida, eso provoca mucha ansiedad, dolor e incertidumbre de no saber qué pasa después Hay una creencia que dice que la persona va a un determinado lugar por las acciones que hizo en vida, eso provoca mucha ansiedad, dolor e incertidumbre de no saber qué pasa después
Las etapas del duelo son popularmente conocidas y la licenciada en psicología tiene una manera interesante de ver la muerte: "Para lidiar con la muerte nosotros primero tenemos que entender que vamos a tener ciertas emociones y que atravesarlas no será algo lineal, reciben el nombre "las etapas del duelo" donde se habla de la negación, el enojo o la ira, la tristeza o la angustia, la aceptación y el aprendizaje".
"Me gusta definir el duelo como un proceso en el cual aprendemos a convivir con la ausencia del otro: la negación generalmente surge bajo los hechos de yo no puedo creer lo que está pasando, creo que estoy viviendo en un sueño, pienso que voy a llegar a casa y voy a ver a esa persona; el enojo puede darse contra la vida o con Dios; la tristeza o la angustia es ese vacío que sentimos ante la ausencia de esa persona y, también se llega a la aceptación que no pasa ni por el reemplazo de esa persona, ni el que la ausencia de esa persona ya no me afecte, sino que estoy llevando mi cotidianidad con esa ausencia", explicó.
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"Muchas personas visitan en determinadas fechas el cementerio, para las fiestas de fin de año, para los cumpleaños o todos los domingos", explicó la psicóloga.
Belén Riccio insiste en que estas etapas no se viven de manera lineal y que todo "llevará al aprendizaje final". Con respecto a las diferentes maneras de vivirlo en relación con cómo se conmemora en México, dijo: "La diferencia es que vivimos a la muerte de diferentes formas en diferentes lugares del mundo, es básicamente el concepto de muerte en sí mismo. Cómo nosotros consideramos a la muerte. Nosotros consideramos a la muerte y a la vida como algo fatalista, como algo gravísimo, como algo que necesariamente nos va a afectar con tonos más negativos en la emocionalidad".
Para finalizar, dio algunos consejos para poder vivir esos momentos de tristeza y desazón con una mirada menos trágica: "Es necesario que contemos con algunos espacios o rituales para conmemorar a esa persona o ese ser de una manera agradable, feliz, si se quiere. Por ejemplo, tener un espacio en la casa que no sea un espacio de uso cotidiano, una silla, porque hay gente que deja vacía la silla de la persona y pone el plato. Eso no es saludable porque no estamos aceptando que esa ausencia".
"Muchas personas visitan en determinadas fechas el cementerio, para las fiestas de fin de año, para los cumpleaños o todos los domingos. Sin embargo, yo propongo y recomiendo que tengamos algo más cerquita, algo a nuestro alcance para conectar un momento con esa emoción. Una vela, un aroma, una foto, algo que nos permita recordar con amor y que no nos produzca daño", concluyó la licenciada en psicología Belén Riccio.