Mejorar la eficiencia energética , aprovechamiento del agua, adoptar fuentes de energías renovables e incluso la gestión de residuos puede calificar, en el mundo de las llamadas "finanzas verdes", como proyectos de inversiones sostenibles. Son las que minimizan el impacto ambiental y actualmente buscan apoyo de los bancos para posibilitarlas en Mendoza.
En ese campo, un relevamiento realizado por la consultora financiera SMS sobre 5 bancos en 8 provincias, señala que Mendoza, con oportunidades de inversión por más de u$d 570 millones, aventaja por mucho a otras. Es parte del proyecto UK PACT, una iniciativa del Gobierno británico que busca fortalecer las finanzas sostenibles en Argentina.
Con apoyo del Ministerio de Hacienda y cámaras empresarias, el relevamiento es parte del plan para brindar asesoramiento de “banca verde” en la provincia. Para eso, SMS trabaja con bancos y agentes financieros, y en Mendoza junto al Nación y el FTyC (Fondo para la Transformación y Crecimiento), la principal entidad financiera no bancaria local.
"Hay que cambiar el mapa mental y no pensar que sólo es paneles solares o molinos. Relevamos oportunidades de inversión para convertirlas en proyectos que capten la atención de bancos que muchas veces tienen dinero para créditos verdes pero no las detectan ", explicó Julián Costábile, CEO y socio de SMS para Latinoamérica, sobre las iniciativas que si además garantizan un impacto social, tendrán más chances.
El UK Pact (Partnering for Accelerated Climate Transitions) es un programa global por el cual Reino Unido se compromete desde el 2020 a financiar algún tipo de proyecto sustentable en países en vías de desarrollo.
Para Costábile "los bancos globales con políticas propias de sus casas matrices asignan un porcentaje de su cartera a finanzas verdes para inversiones, pero tampoco significa que una pyme puede ir a cualquier de ellos y podrá acceder. Nos proponemos trabajar más con los bancos locales, que están más cerca de la gente pero tienen menos conocimiento".
"Finanzas sustentables en Argentina" fue seleccionado entre varias iniciativas de todo el mundo por el Green Recovery Challenge Fund (Fondo para la Recuperación Verde), que promueve el gobierno británico. Y Mendoza, luego del NEA, es la segunda región en la que pone foco desde 2022.
"Aunque lo son desde mucho antes, aportamos información sobre los productos que pueden aportar a las finanzas "verdes" y las necesidades de financiamiento sustentable. Vemos en los últimos años una demanda de créditos para eficiencia energética y riego, y también para compra de paneles solares", señaló por su parte Agustina Mobilia, del FTyC, sobre el cual el diagnóstico de SMS destaca su complementariedad con el Banco Nación.
La n° 1 entre 8 provincias
La agroindustria, con el 42%, seguida por la construcción (21%), manufacturas (14%) y el turismo, son los rubros que más movilizan en Mendoza proyectos de inversión "verde". A nivel global, se trata de apuestas que, en promedio, oscilan entre los u$d 10.000 y u$d 30.000 según su importancia.
Así lo indica el relevamiento realizado con la participación del IDR (Instituto de Desarrollo Rural), Bodegas de Argentina y AEHGA (Asociación de Empresarios Hoteleros y Gastronómicos de Mendoza), entre otras entidades y firmas como Fecovita, con aval oficial a través del Ministerio de Hacienda de la provincia.
El dato detectado: con 110 proyectos u oportunidades concretas de inversión, por un total de u$d 570 millones, lidera entre las 8 provincias relevadas. Un monto muy superior al de Neuquén, que le sigue en segundo lugar con casi u$d 300 millones, y Misiones (280 millones).
Según MarcBenhamou, experto francés en sustentabilidad a cargo del estudio "hay muchas oportunidades de inversión en Mendoza impulsadas por actores del sector agrícola e industrial relativas a la crisis hídrica y la demanda de energía. En cantidad, duplica al resto, y en general hay un universo importante de empresas de triple impacto (miden el económico, ambiental y social) con modelos de negocio sostenibles que necesitan financiar maquinaria y capital de trabajo".
El relevamiento muestra que en el rubro industrial y agroindustrial se priorizan los proyectos que apuntan al tratamiento de efluentes y también la certificación de normativa de calidad sobre gestión ambiental. "Son inversiones intangibles, pero críticas, como medir huella de carbono. Y hay poco financiamiento para eso", precisó Benhamou.
Para Mobilia, actualmente las finanzas "verdes" del Fondo están diversificadas más allá la eficiencia y la reconversión a fuentes de energía renovable. En ese sentido, lo ejemplificó con la línea para inversiones en eficiencia hídrica "que también ayudan en la prevención de heladas, un fenómeno relacionado con el cambio climático. Y la malla antigranizo, que es nuestro caballito de batalla desde el principio y permite mitigar sus efectos".
Algunos proyectos
Los plazos de retorno son un factor clave a considerar. Y en tal sentido, el consejo es que "hay inversiones que no tienen un retorno inmediato sino que conllevan entre 2 y 3 años para el repago. Pero además hay que tener en cuenta una proyección de riesgos en cuanto al movimiento de las tarifas".
Sucede en los proyectos vinculados a la mejora de eficiencia energética (menor consumo para el rendimiento habitual) y adaptación a fuentes de energía renovables (van entre los u$d 6.000 en hogares a más de u$d 10.000 en empresas), a pagar entre 36 y 48 meses. La instalación de termotanques solares, el bombeo para riego con ese sistema y la generación distribuída de energía están a tope.
Entre los proyectos de construcción, junto a la eficiencia térmica, dominan la iniciativas para la mayor aislación de los edificios y viviendas, el uso de materiales constructivos no tradicionales y también la gestión de residuos.
Por caso, AEHGA impulsa la producción local de todos los insumos gastronómicos para acortar la cadena de proveedores, y así "lograr una mayor confiabilidad".
En el sector turístico predominan los diagnósticos tendientes a mejorar la eficiencia energética, aunque con algunos condicionantes.
"Los empresarios hoteleros en cierto modo se espantan con la proyección del impacto que puedan tener las tarifas a futuro", acotó al respecto Benhamou.
Desde el Fondo adelantaron que "la voluntad es seguir adelante para poder aplicar las conclusiones del relevamiento, aunque dependerá de las decisiones del Consejo Asesor".