El ámbito de la cultura está pasando un momento crítico. No sólo que todavía está latente la salida de Luis Puenzo al frente del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) en el marco de una jornada de protesta que llevó al Presidente, Alberto Fernández, a tomar la decisión de desvincularlo del cargo, sino que el sector está en estado de reclamo urgente para impedir la caducidad de las asignaciones específicas del Fondo de Fomento para la Cultura. Este jueves habrá acciones. Un festival en Buenos Aires y una manifestación en Mendoza con las urgencias propias del territorio local.
Festival "Evitemos el apagón cultural" frente al Congreso de la Nación
A causa de una reforma tributaria aprobada por el Congreso durante diciembre de 2017, Ley 27.431 (art.4), los organismos de fomento a la cultura del país dejarán de recibir a partir del año que viene sus asignaciones específicas.
La norma prevé la caducidad de los fondos que recauda el Estado que van directamente al fomento de diversas actividades, entre ellas el teatro, el cine, la música, las bibliotecas populares, las radios y medios comunitarios a través de sus organismos e instituciones nacionales.
Por este motivo es que el sector artístico está desde hace tiempo en estado de alerta y pide a la Legislatura tratar un proyecto de ley que extienda la vigencia de estas asignaciones a la cultura por 50 años.
En defensa de la Soberanía Cultural y bajo el lema "Evitemos el apagón cultural, la Cultura no caduca", este jueves 28 de abril, entre las 16 y las 20 horas, se realizará un festival frente del Congreso de la Nación convocado por Unidxs por la Cultura, una organización integrada por colectivos artísticos de todo el país.
"Realizamos este evento con el objetivo de visibilizar la gravísima y urgente situación que está atravesando todo el sector cultural debido al efecto que tendría la concreción del plazo dispuesto por la Ley 27.432, votada en diciembre de 2017, que pone fin a las asignaciones específicas a cada sector a partir del 1º de enero del año próximo", reza el texto de difusión del frente cultural.
"De producirse la caducidad de estas asignaciones, se afectaría la matriz productiva de la cultura y quedarían desfinanciados el Instituto Nacional de Teatro (INT), El Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), el Instituto Nacional de la Música (INaMu), las Bibliotecas Populares, las Radios y los Medios Comunitarios, entre otros sectores", agrega el comunicado.
"Solicitamos el urgente tratamiento en el Congreso del proyecto de Ley presentado en Septiembre del 2021 (Expte. 3823-D-2021), que extiende la vigencia de estas asignaciones a la cultura por 50 años. Así mismo remarcamos con énfasis que estas asignaciones específicas, que son el motor de nuestra Cultura, provienen entre otras fuentes, de un porcentaje de las entradas de cine, de la retención a los premios de la Lotería Nacional, de un canon por publicidad que pagan los medios televisivos y radiales, son ingresos que genera la propia actividad cultural".
También aclara que "Desde @Unidxs_por_la_Cultura creemos que la producción cultural es constitutiva de nuestra identidad colectiva y debe ser el Estado, el garante de la inclusión de la diversidad de miradas y de territorios. Sin dejar en manos exclusivamente del Mercado, nuestros bienes culturales".
Del festival frente al Congreso Nacional participarán: María Onetto, Delegación Misiones, Sakatumba, Ballet Nahuen, Sokoles, el colectivo de Actrices Argentinas, Paula Ferré, Ballet Raíces, María y Cosecha, Autoras, Claudia Ley, Dabke Ballet Palestino, UDEMUS, Francisco Alvero y Arbolito, en el cierre.
Contra el vaciamiento y el desfinanciamiento de la Cultura de Mendoza
El ambiente también está encendido dentro de la comunidad artística de la provincia por un descontento generalizado por parte de los y las trabajadoras de la cultura en relación a la gestión que lleva adelante el Estado mendocino respecto al sector.
Para reclamar por políticas culturales serias y la separación de la cartera de Cultura y Turismo que actualmente preside Nora Vicario, este jueves se ha convocado a una manifestación en la sede del ex Banco Hipotecario. Con una invitación a la comunidad en general para que sume su participación con intervenciones artísticas, los y las integrantes de la asamblea de trabajadores y trabajadoras de la cultural se darán cita en el lugar desde las 11.30 y hasta las 14.
"Desde la Asamblea de trabajadoras y trabajadores de la Literatura llevamos ya dos años trabajando en esto y otras asambleas también se han ido fortaleciendo en el camino. No es una respuesta a lo de Buenos Aires sino que es parte de un proceso, que en este caso hay muchas cosas que tenemos en común, pero lo que hacemos acá es un reclamo provincial y lo teníamos agendado hace mucho", cuenta a este medio la escritora Melisa Carrasco.
La Coordinadora de Trabajadorxs de la Cultura de Mendoza celebró dos asambleas generales, los días 9 y 23 de abril, con la participación y representación de distintos sectores artístico-culturales de la Provincia para analizar el estado del arte y la cultura mendocina. De estas asambleas surgió un texto que visibiliza la situación. Ser reconocidos como trabajadores, que se implementes políticas adecuadas para el sector y que no se mercantilice la cultura, son parte de los reclamos que busca poner de manifiesto el colectivo artístico mendocino.
El comunicado explica puntualmente entre otras cosas que:
"La situación de la cultura y sus trabajadorxs en Mendoza es crítica. Superada la pandemia que agudizó la ya grave realidad de lxs trabajadorxs del arte, el actual contexto no ha variado significativamente: vaciamiento presupuestario y sostenido a las artes y la cultura, lo que incluye precarización laboral, contratos irregulares, atrasos en los pagos del Fondo de la Cultura Provincial, falta de políticas culturales públicas a mediano y largo plazo, carencia de un plan provincial de cultura, ausencia de herramientas, instancias de formación y circulación, nula publicación de obras literarias, atraso en los pagos de premios provinciales como también en la publicación de libros premiados, cajoneo liso y llano de proyectos presentados por colectivos artísticos, y un largo etcétera de situaciones que no son nuevas, sino que se han repetido en el tiempo y han ido escalando peligrosamente.
Ante este alarmante panorama nos manifestamos diciendo bien fuerte que:
El arte y la cultura son y generan trabajo y riqueza, porque el tiempo libre y el disfrute del ocio creativo son una necesidad humana básica y un derecho.
Exigimos trabajo digno y respeto por nuestros derechos laborales y profesionales, es decir, "cobrar" por nuestro trabajo, en dinero, pagado en tiempo y forma, cosa que hace años no sucede.
Demandamos políticas culturales amplias, diversas y con perspectiva de género. Enmarcadas en un plan provincial anual que contemple la participación de lxs trabajadorxs del arte en su elaboración y distintas fases.
Repudiamos la banalización del arte, que termina como exhibición turística sin curaduría ni valoración alguna y nos paramos frente a su mercantilismo, que borra nuestra identidad cultural como región.
Denunciamos los intentos de vaciamiento presupuestario hacia los distintos sectores que nuclean el hacer cultural. En el año 2017 se incorporó un artículo en la Ley de Presupuesto aprobada por el Congreso de la Nación que puso plazo de vencimiento a las pocas leyes de asignación específica que quedaban vigentes.
Venimos de años de disminución de los presupuestos de cultura y educación, tercerizaciones con dudosas licitaciones que limitan y desdibujan y van a terminar con nuestro patrimonio arquitectónico y material (vale recordar el incendio del ECA y la ocupación gastronómica de la Mansión Stoppel), por ello nos encontramos reclamando".