La Semana de la Lucha contra la Muerte Súbita- del 21 al 28 de agosto- es una buena oportunidad para aprender más sobre estos episodios fatales y saber que no sólo se pueden prevenir sino que a través de maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) se pueden salvar vidas.
En el mundo, una persona muere cada un minuto por muerte súbita, en Argentina, se producen 100 mil muertes por año a causa de enfermedades cardiovasculares. Entonces, ¿qué es la muerte súbita? ¿A qué señales hay que prestar atención?
Alejandro Saracco, médico cardiólogo, instructor de RCP de la Federación Argentina de Cardiología, y parte de los programas de prevención de enfermedades cardiovasculares del Ministerio de Salud de Mendoza definió a la muerte súbita como “un evento inesperado que en el que un paciente que comenzó a experimentar síntomas, fallece en las primeras 24 horas, en la mayoría de las ocasiones sin saber si quiera que estaba enfermo”.
“El motivo de la muerte súbita es la tensión de la circulación sanguínea, eso lo genera la detención del latido cardíaco: el corazón entra en una arritmia que no hace contracción sino que produce una fibrilación entonces no hay latido cardíaco, sin latido no hay circulación, no hay pulso, no hay presión por lo que el cerebro se apaga y la persona se desploma”, agregó.
Ahora bien, si esa persona no recupera la circulación entre los primeros 3 y 4 minutos desde que cayó, se empieza a generar un daño cerebral y muere “porque lo único que necesita es que llegue sangre al cerebro para que active todo el sistema eléctrico y mantenga las condiciones de la respiración y la de los órganos”, señaló el médico cardiólogo.
Saracco señaló que el órgano más sensible es el cerebro. Para muestra basta un botón: la medicina puede trasplantar un riñón, un corazón pero no un cerebro, no lo soporta. Entonces, ejecutar las maniobras de RCP cuando la persona pierde el conocimiento- que sería comprimir el pecho fuerte y rápido- y solicitar un desfibrilador que puede dar una descarga eléctrica son las únicas vías que pueden detener la arritmia (que es la fibrilación ventricular) y salvar una vida.
“El motivo de la fibrilación ventricular generalmente es un infarto agudo de miocardio. Ese es el primer motivo de muerte en el mundo: la enfermedad cardiovascular. Pensemos que en el planeta, una persona muere cada cuatro minutos por un ACV y cada un minuto por enfermedades cardiovasculares”, señaló el profesional.
¿Qué hacer si una persona se desploma repentinamente?
En estos casos, todas las personas pueden salvar vidas aprendiendo maniobras de RCP para ejecutarlas de inmediato mientras se solicita un desfibrilador. “Este tema de anclar la muerte súbita con la prevención es muy importante porque para evitarla tengo que evitar un infarto y para eso tengo que eliminar los factores de riesgo que son: sedentarismo, obesidad, tabaquismo, hipertensión y azúcar elevado, por mencionar los más importantes”, señaló Saracco.
Y agregó: “No fumar, hacer actividad física y comer sano sería el tratamiento, mejor dicho, la prevención de la muerte súbita. Cuando la persona sufre un infarto, muy probablemente, haga una arritmia cardíaca y eso sucede en los primeros minutos u horas desde el momento en el que el paciente se infarta. Por eso, la muerte súbita ocurre en contexto extra hospitalario porque el paciente con dolor de pecho, con un infarto, no alcanza a llegar al hospital a tiempo”.
“Es importante tener en cuenta que si una persona se desploma ante nosotros, debemos hacer RCP hasta que llegue al lugar el servicio de emergencias con un desfibrilador. Si pierdo la fuerza, alguien debe relevarme. La cuestión es clara: actuar hasta que venga el equipo de salud, no detener las maniobras hasta que llegue la ambulancia. Por eso es importante capacitarse y saber hacer RCP en una superficie rígida hasta que llegue la descarga eléctrica que saque a la persona de la arritmia y así salvarla”, expuso el médico.
¿A qué señal hay que prestar atención?
Muchas veces, las personas experimentan una molestia en el pecho pero la ignoran o encuentran justificaciones para restarle importancia. Lo cierto es que ante una sensación de dolor, presión, aplastamiento o ardor en el pecho, es necesario- y vital- acudir rápidamente a un centro asistencial o un hospital para someterse a un electrocardiograma o a los estudios que el profesional crea pertinentes en el momento. Además, en caso de que se produzca el infarto, se le brindará atención de inmediato que evitará la muerte.
“Cuando aparece una sensación de malestar en el pecho tengo que pensar en que puede ser un problema coronario, sobre todo, en pacientes adultos, por encima de los 40 años. La molestia en esta zona es un aviso de que algo está pasando a nivel cardíaco y no hay que ignorarlo o restarle importancia”, explicó Saracco.
“Muchas personas que sufren este fatal desenlace no sabían que tenían presión alta o no eran del todo conscientes de lo dañino que es fumar o que el sobrepeso puede generar enfermedades cardíacas o las consecuencias del colesterol alto o del sedentarismo y como ninguna de estas enfermedades presenta síntomas importantes no le dan importancia, como son patologías o enfermedades asintomáticas, si el paciente no acude para hacerse controles que puedan ponerlas en evidencia, no hay cambios de hábitos para evitar este riesgo”, sumó.
“Son los hábitos poco saludables que tenemos los causantes la muerte súbita. Hay que tomar consciencia recordando que no hay síntomas. Entonces, hay que enfocar en la prevención y advertir sobre los factores de riesgo que pueden desencadenarla y, sobre todo, ante una molestia en el pecho, consultar cuanto antes a profesionales de la salud”, cerró Saracco.