El sindicado autor intelectual de la muerte de Ezequiel Salas dijo sus últimas palabras frente al Tribunal de la Quinta Cámara, antes de escuchar la sentencia donde arriesga la pena máxima. También habló Héctor Morales, el otro imputado.
Momentos antes de escuchar la sentencia que podría condenar a Marcelo Araya y a Héctor Morales a la pena máxima de prisión perpetua, ambos imputados dijeron sus últimas palabras frente al Tribunal de la Quinta Cámara del Crimen.
Morales, sindicado como el auto material de la muerte de Ezequiel Salas -ocurrida en enero de 2010- indicó yo no maté a Ezequiel. Soy inocente. La voz de los audios no es la mía.
Por su parte, Marcelo Araya sostuvo he visto que el debate no ha sido un trámite fácil. Lo único que quiero decir es que a la señora Arbona la oficial que investigó las escuchas- no la conozco, y ella nunca pudo haberme escuchado hablar en persona.
El Gato también se refirió a Juan Carlos Caleri, director de la Policía y último testigo en presentarse. Respecto al comisario retirado, dijo él dijo que tenía un conocimiento superficial de la causa, y después aseguró que Marcelo Araya era el objetivo principal, y que a pesar de que las escuchas eran NN, desde el inicio tenían una orientación hacia mi.
Se me ha querido ensuciar desde la cartera de Seguridad, en forma injusta. No sé cuál es la necesidad de hacer convencer a la sociedad que soy un narcotraficante y un mafioso, estando en un penal de máxima seguridad donde apenas tengo acceso a una visita por semana y a un teléfono público, siguió el conocido hombre del barrio La Gloria.
A Salas no lo conozco, desde los 18 años estoy preso y cumplo mi condena de 20 en el 2016. No maté a nadie y no soy miilonario. Confío en esta Cámara y en la Justicia, finalizó el hombre, quien este mediodía podría ser condenado de homicidio agravado.