Minutos después de las 12 en el primer piso del Palacio de Justicia se dio inicio al año judicial. Con un salón de actos colmado, y con la presencia del gobernador Francisco Pérez, se llevó adelante formalmente la apertura judicial.
Minutos después de las 12 en el primer piso del Palacio de Justicia se dio inicio al año judicial. Con un salón de actos colmado, y con la presencia del gobernador Francisco Pérez, se llevó adelante formalmente la apertura judicial.
Tras realizar un minuto de silencio por las víctimas del accidente ferroviario, se escuchó un show lírico y flamenco que continúo, finalmente, con el discurso del presidente de la Suprema Corte, Pedro Llorente.
Entre los invitados, además del Gobernador, estuvieron presentes, la presidente provisoria del Senado, Miriam Gallardo, el ministro de Gobierno, Félix González, el intendente Víctor Fayad, el ex gobernador Rodolfo Gabrielli y representantes de la Justicia Federal.
Tal como ocurrió en el discurso de asunción, Llorente dio un discurso alejado de la polémica y apuntó a la necesidad de acelerar los tiempos de la Justicia y en lograr un Poder Judicial abierto e integrado a la sociedad, pero resaltando su independencia.
Sin referencia a los jueces que se negaron a aportar a OSEP ni con reclamos al Ejecutivo, más allá de una referencia a las restricciones presupuestarias, las palabras del presidente de la Suprema Corte se encaminaron en mencionar los lineamientos generales a lograr durante los próximos dos años.
De esta manera, Llorente subrayó su convencimiento en lograr un nuevo modelo de Justicia e implementar una modernización de la gestión judicial. Con respecto a la infraestructura, el presidente de la Suprema Corte indicó la instalación de nuevos juzgados en toda la provincia.
En tanto, Llorente no dejó de hacer referencia a la partida presupuestaria y recalcó que desde el Poder Judicial, han acompañado las restricciones que el resto del sector público posee.