La audiencia se reanudará a las 9 con la formulación del alegato del fiscal del juicio, Adrián Landini, quien imputa a Luna por "homicidio simple", delito que prevé una pena de entre 8 y 25 años de cárcel.
"En el proceso se dio lo que esperábamos y en los alegatos, mantendremos la postura de un homicidio simple", dijo Landini el martes.
Luego será el turno de alegar para el particular damnificado, representado por los letrados Pérez Solís y Miguel Angel Arce Aggeo, y finalmente lo hará la defensora oficial, María Fernanda Montero.
El juicio a cargo de los miembros del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 3 de Mercedes, Alejandro Caride, Eduardo Costa y Ricardo Marfía, tuvo el martes la segunda y última audiencia de la etapa testimonial con la declaración de dos peritos legistas y un médico.
El primero de los testigos del día fue el perito legista Raúl Benavente, quien presentó al tribunal los resultados de la autopsia de Bruzzoni (40) que tuvo a su cargo.
Además declararon otro perito de parte y el médico que atendió a Bruzzoni en el hospital de General Las Heras, quienes coincidieron con Benavente en referencia a la ubicación del mazazo y a la posición desde la cual pudo haberlo realizado Luna (32).
Luna, quien hasta el momento no declaró en el juicio, tendrá este miércoles su última oportunidad de hacerlo antes del veredicto, previsto para la próxima semana.
De acuerdo con la investigación, Bruzzoni fue atacada con una maza para aplastar milanesas, mientras hablaba por celular la mañana del sábado 17 de abril de 2010, en el patio del bar y restaurante Matute de Las Heras.
Según se ventiló durante el debate, Luna le recriminaba a la víctima que iba a arruinarle su casamiento al mostrar a los invitados un supuesto video en donde aparecía con un hombre manteniendo relaciones sexuales.
Los investigadores determinaron que el fuerte golpe con la maza metálica le provocó a Bruzzoni fractura y hemorragias de cráneo.
Tras el ataque, Carola le pidió al dueño del bar, Juan Prado, que la llevara a su casa, pero tras llegar debió ser conducida de urgencia por su marido al hospital, donde permaneció internada en grave estado y en coma profundo durante varios días, fue operada tres veces hasta que finalmente murió.