Los estadounidenses tuvieron el martes su primera oportunidad de contratar seguros médicos mediante los centros establecidos en internet para tal efecto, los cuales constituyen el núcleo de la reforma de salud promulgada por el presidente Barack Obama, pero los sitios Web del gobierno, diseñados a fin de vender las pólizas, tuvieron problemas para dar cauce al intenso tráfico cibernético.