La palabra "turistas" es recurrente por estos días. En realidad, meses. O quizás, ya años, porque en Mendoza su crecimiento viendo siendo sostenido, con cada vez mayores ganancias. Los chilenos, que ya llegaron a nuestra provincia para vivir la Copa América, gastan aquí entre 120% y 125% más en promedio que hace tres años, y esto representa el doble que un argentino de visita. Los extranjeros quedan bastante más atrás, pese a que también el número de estos visitantes se ha incrementado.
Desde este fin de semana que pasó, mientras los mendocinos veíamos las imágenes de chilenos con sus banderas rodeados de nieve al pasar el túnel internacional, desde el gobierno y migraciones revelaron que la cantidad de trasandinos está a punto de alcanzar un récord, ya que se espera que hoy completen los 20.000, reeditando un fenómeno que se vio en el 2002, cuando venían a comprar tras la devaluación.
"Se estima que el 100% de las plazas hoteleras formales estarán ocupadas y habrá aproximadamente 30 mil personas visitando la provincia", ha anticipado el Ejecutivo. El propio Secretario de Turismo, Luis Böhm, vaticinó que las 17.000 camas habilitadas en el Gran Mendoza estarán cubiertas.
En la Copa América Chile debuta hoy contra México en San Juan, sin embargo los visitantes del vecino país se alojan en Mendoza, donde se jugarán cuatro partidos, entre ellos una de las semifinales del torneo. La actividad arrancará el viernes 8 con Perú y México a las 19.15 y con Uruguay-Chile a las 21.45. El martes 12 el campo de juego convocará a Perú y Chile y el miércoles 20 se jugará la semifinal.
Esto significa una inmejorable oportunidad para Mendoza y su economía. Y hay que reconocer que se han tomado medidas para evitar inconvenientes, pero tanto el sector público como el privado no deben relajarse durante los días de competencia, en el primer caso, ni especular con los precios, en el otro.
Hay que convivir con los turistas chilenos y, aunque poco se haya reconocido en los últimos días al respecto, la inseguridad es un miedo latente. Ni hablar de que cualquier inconveniente de ese tipo nos haga trascender en la prensa internacional de la manera menos grata.
Ayer hubo una alarma, que finalmente resultó falsa, pero sirve para no bajar la guardia. Medios de prensa de Perú aseguraron que dos futbolistas de su selección fueron víctimas de un robo en el hotel Diplomatic de Ciudad (donde se aloja el plantel) y la Policía de Mendoza salió a desmentir inmediatamente el hecho. Fue un verdadero alivio.