Luego del fracaso del pedido de endeudamiento en dólares y el roll over en la Cámara de Diputados, el Senado se aprestará a continuar el tratamiento del Presupuesto en la primera semana de marzo.
Luego del fracaso del pedido de endeudamiento en dólares y el roll over en la Cámara de Diputados, el Senado se aprestará a continuar el tratamiento del Presupuesto en la primera semana de marzo.
Sin sesiones en la Cámara Alta previstas para la semana próxima (por los feriados de Carnaval), el 3 de marzo la iniciativa obtendrá estado parlamentario en ese cuerpo legislativo. Así, todavía resta definir si la propuesta llegará al recinto el 10 de marzo o antes, con una solicitud de sesión especial.
Tras la caída de la toma de créditos y el refinanciamiento de deuda de ejercicios anteriores, la relación entre el radicalismo y la oposición se complicó. La mañana siguiente a la votación, las acusaciones cruzadas a través de las redes sociales se multiplicaron y, posteriormente, se amplificaron en los medios con la participación de intendentes y funcionarios.
En Diputados, el pedido de endeudamiento fracasó. Foto: Luis Rodríguez.
Por esto, queda por determinar cuál será la estrategia que elegirá el Gobierno para avanzar con su objetivo: si insistir en el Senado a la espera de un cambio de posición del justicialismo, enviar los proyectos de obras con endeudamiento por separado o desistir completamente.
El viernes, el jefe comunal de Tunuyán, Martín Aveiro, cargó contra el Ejecutivo y afirmó que ya cuenta con U$S200 millones aprobados en la gestión de Alfredo Cornejo. "Es un país en quiebra, en default, por el cual el propio FMI salió a decir que la deuda es inviable; y el Gobierno provincial, que ya tiene U$S200 millones quiere otros U$S300 millones. Quiso borrar la Legislatura durante cuatro años", sostuvo.
Ahora la propuesta deberá ser analizada en el Senado. Foto: Yemel Fil.
En enero hubo reasignación de partidas en distintas áreas del Estado debido a la ausencia de la nueva pauta de gastos. Además, las discusiones paritarias se postergaron para marzo y, aunque los gremios apuntarán a que no se pierda, el Gobierno ya avisó que no continuará la cláusula gatillo que actualizaba salarios al ritmo de la inflación.