El precandidato a intendente en las Primarias Abiertas Simultaneas y Obligatorias (PASO), por el oficialismo malargüino, justificó el mal resultado en las urnas diciendo que se trató de un voto castigo a la actual gestión municipal que no cumplió durante estos años con las promesas de campaña de 2.015, justificando la situación argumentando que se encontraron con "una municipalidad muy destruida".
Más aplomado, el concejal radical dijo que "uno que está en política sabe de estas cosas, de derrotas, de ganar, y estar preparados para todas estas situaciones".
Fernando Glatigny dijo además que por estas horas se está realizando "una autocrítica muy fuerte", focalizada en la poca llegada al electorado que tuvo el proyecto que proponía su lista.
El actual presidente del Concejo Deliberante consideró que el resultado del domingo pasado fue "un voto castigo a la gestión", asumiendo él, por ser el candidato del oficialismo, la responsabilidad del traspié electoral.
Glatigny comparó a las elecciones de los años 2.019 con las del 2.015, cuando el frente Cambia Mendoza si impuso al peronismo malargüino y obtuvo la intendencia.
Sobre el tema, manifestó que era más fácil ser oposición para decir las cosas que estaban mal, pero justificando lo acontecido este fin de semana diciendo que "nos encontramos una municipalidad muy destruida", y que no les permitió cumplir con las promesas de campaña del 2.015.
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