El fenómeno de los jóvenes disfrazados de payasos diabólicos empezó en EE UU y se ha ido extendiendo por el resto del mundo. En España, el municipio de Paterna (Valencia) ha sido el último que ha visto pasear a estos inquietantes bufones por sus calles. Y en Alemania, un joven disfrazado de clown ha sido acuchillado cuando trataba de asustar a un chico de 14 años.