Babasónicos y Tan Biónica hicieron delirar a miles de jóvenes que coparon el Frank Romero Day para deleitarse con su música. La fiesta máxima de los mendocinos tuvo así un magnífico cierre luego de cuatro noches mágicas.
Después de tres jornadas de lujo en el que pasaron destacadas figuras de la música nacional e internacional, la última repetición de la Fiesta Nacional de la Vendimia dedicada a los jóvenes vibró con la energía de Babasónicos y la banda del momento, Tan Biónica.
De esta manera Sinfonía iluminada de gloria se despidió a lo grande en un Fran Romero Day que volverá a encenderse el año entrante cuando Mendoza abra nuevamente sus puertas para celebrar la celebración máxima de su tiempo de cosecha. Sinfonía iluminada de gloria por su parte volvió a ponerse en escena y se cargó con todos los aplausos del público que volvió a ovacionar a los artistas que lo hicieron posible. Entre ellos, el invitado de lujo de esta edición, Hernán Piquín, que tomó la palabra para expresar su emoción y agradecimiento por su participación.
El bailarín, Hernán Piquín, en la última noche junto a las artistas de la Vendimia 2014.
El poder de seducción de Babasónicos
Con el imponente marco del Frank Romero Day colmado de expectativas por escucharlos, Babasónicos comenzó su show en Mendoza después de que los fuegos artificiales se encendieran por última vez en la última repetición de la Vendimia 2014.
Endiosado de actitud como de costumbre, el grupo liderado por Adrián Dárgelos volvió a demostrar en suelo local las razones de ser una de la bandas del rock nacional que supo moldear su propia génesis dentro de una escena poblada de formulas. El escenario se volvió el espacio a conquistar por su amplitud y la lejanía del público que desde las gradas marcaba una presencia avasallante, sin embargo los músicos lo supieron resolver con un pastillero de éxitos y canciones de su último álbum Romantisísmico.
Babasónicos abrió una noche dedicada a los jóvenes.
El track que encendió la hora y media de show fue Irresponsables y Sin mi diablo, la revancha del tema que dejó latiendo sus ganas de sonar en el último recital que dio la formación en el auditorio Ángel Bustelo cuando presentó su último trabajo discográfico. La lista de temas continuó con Microdancing, Los burócratas del amor, Los calientes, Aduana de palabras, Cuello rojo, Canción llévame lejos y Fiesta popular.
A esa altura todo estaba servido a los pies de su carismático y particular líder. No saben que esplendidos que se ven ustedes desde acá, incluso los del cerro, les vamos a dedicar una canción, dijo Dárgelos y los acordes de la guitarra invadieron con el clásico El loco. Después irrumpió el vibrante Y qué, El ídolo y el primer corte de difusión del nuevo disco: La lanza.
Así se fue entramando un concierto en el que el electro rock experimental se apoderó de la noche dedicada a los jóvenes. Dárgelos le dio a la gente una dosis de su efervescente despliegue de bailarín exótico. Sus movimientos corporales y sus ansias de embeberse del calor popular, se rindieron al latir de cada canción. Su voz supo sortear el desafío de proyectarse al aire libre y la banda sonó con potencia. El final trajo más éxitos de la extensa discografía del grupo. Los desfachatados Putita, Carismático y Negrita, completaron el viaje musical que Babsónicos brindó en suelo local.
Tan Biónica y su show electro pop
Son la banda del momento y eso nadie lo puede discutir. Convocan multitudes y hacen delirar a miles de jovencitas en cualquier punto del país. Con ese peso de popularidad sobre la espalda es que los Tan Biónica pisaron el Teatro Griego para cerrar la última noche de repetición de la Vendimia dedicada al público juvenil y al género del rock.
Tan Biónica hizo delirar a miles de jovencitas en el Frank Romero Day.
Lo cierto es que la agrupación porteña comandada por el Chano Moreno Charpentier, más que agite rockero, proponen desde su concepción musical una fiesta pop dance de pulso electrónico. Y esto es lo que trajeron a la tierra del sol y del buen vino, parte del show de su tour Destinológico.
Es decir, una explosión de luces, proyecciones audiovisuales y sonidos que acompañan a las canciones que ya se impregnaron como parte del inconsciente colectivo popular. De esta manera y ante la histeria desatada de un público adolescente que bailaba se escuchó: Vámonos, Hola noviembre, Loca, Mis noches de enero, Ciudad mágica, Ella, Obsesionario en la mayor y La melodía de Dios, entre otros temas.