En el encuentro de más de una hora en Roma, el presidente se excusó por los improperios en campaña. A la salida, dijo que Francisco “se mostró satisfecho”.
El Papa Francisco recibió al presidente argentino Javier Milei durante casi 70 minutos en el Vaticano. En el encuentro, el libertario volvió a pedir disculpas por los insultos que le propinó al sumo pontífice en la campaña electoral (y en entrevistas previas), y hablaron sobre la dura situación socioeconómica que atraviesa el país.
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Si bien la actividad se dividió en tres partes, en dos de las cuales participaron terceros, la mayoría del tiempo los jefes de estado se encontraron solos, sin testigos. Sobre el final se sumó la comitiva argentina integrada por la secretaria general de presidencia, Karina Milei; y los ministros Diana Mondino (Relaciones Exteriores), Guillermo Francos (Interior) y Sandra Pettovello (Capital Humano).
Tras el primer contacto del domingo, durante el acto de canonización de Mama Antula, Milei le pidió disculpas al anfitrión “por mis declaraciones” en el pasado, entre las cuales destacan "jesuita que promueve el comunismo", "personaje impresentable y nefasto", "representante del maligno en la Tierra" o "zurdo h...de p... que anda pregonando el comunismo por el mundo".
Según publica el sitio Infobae, la respuesta de Jorge Bergoglio fue que “son errores de juventud que todo el mundo comete”, dando por cerrada la cuestión. En declaraciones públicas previas, el líder religioso le había bajado la espuma al conflicto, al decir que “son cosas que se usan para crear un poco de atención, pero después caen solas”.
En la charla que mantuvieron, el Presidente insistió con la presencia del líder religioso en el país a mediados de año, lo que marcaría su primera visita a la Argentina desde que fue ungido Papa. Jorge Bergoglio escuchó, pero no hubo confirmación.
Milei también hizo un repaso de las medidas económicas adoptadas por su Gobierno, y del plan de contención social con el que busca aplacar las consecuencias del fuerte ajuste que lleva adelante.
“Se mostró satisfecho por el programa económico y su contención social”, indicó el libertario a la salida de la cumbre en el Vaticano.
“Durante las cordiales conversaciones en la Secretaría de Estado, se expresó satisfacción por las buenas relaciones entre la Santa Sede y la República Argentina y el deseo de reforzarlas aún más. A continuación, se detuvieron en el programa del nuevo Gobierno para enfrentar la crisis económica”, consignó un comunicado difundido por la Santa Sede pasado el mediodía local.
Aunque escueto, el teto confirmó que, efectivamente, la preocupante situación actual, de la que alertaron recientemente por los obispos argentinos, fue un tópico de la charla. “En la continuación de la conversación, se abordaron varios temas internacionales, en particular los conflictos actuales y el compromiso por la paz entre las naciones”, agregó el texto elaborado por la Secretaría de Estado del Vaticano.
Francisco Sánchez, secretario de Culto, aseguró una vez finalizada la reunión: “Tuvimos una audiencia papal llevada adelante de una manera muy cordial, con mucha simpatía entre los dos”. Y analizó: “El Papa le dedicó más de una hora a una audiencia a la que no se le suele dedicar tanto tiempo”.
El funcionario aseguró que varios cardenales dijeron estar sorprendidos por la buena sintonía que mostraron Francisco y Milei. “Ellos recordaban antecedentes que no habían sido así, por eso llamó la atención de todo el mundo”, reconoció.
Y completó: “Todo se desarrolló muy por encima de los estándares y estamos muy satisfechos”.