La Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) estimó que las ventas navideñas crecerán entre 10% y 15% en cantidad de unidades por encima de las de igual período del año pasado. Su secretario de prensa, Vicente Lourenzo, dijo que "las ventas de estos días confirman que estamos ante unas fiestas muy importantes, y la estimación es que van a superar ampliamente a la Navidad de 2011, que fue un año de gran consumo".
"Desde la semana pasada hay una fuerte presencia del público haciendo compras, pero -a diferencia de otros años- la gente tendrá tres días completos para buscar sus regalos", explicó el directivo al referirse a la previsión de compras de sábado, domingo y el feriado del lunes. Esta expectativa "hace presumir más cantidad de unidades de productos vendidos por arriba de los dígitos, seguro", enfatizó Lourenzo. Así, señaló que la estimación de CAME se ubica "entre el 10% y el 15% arriba respecto de 2011".
El dato de crecimiento no resulta menor si se tiene en cuenta que 2011 es considerado "un muy buen año de consumo", y que en la Navidad registró un crecimiento del 10,8 por ciento respecto de igual festividad de 2010. "Probablemente estemos ante una Navidad en consumo tan importante como la de 2007, que fue una explosión de consumo muy considerable y que marcó para el sector una bisagra ya que reflejó la consolidación de ingresos de la gente que se volvó masivamente al consumo", explicó.
Lourenzo también entendió que la expansión del consumo que se espera para este último tramo del año, no se corresponde con el comportamiento del sector durante 2012. "La realidad es que 2012 se caraterizó por un consumidor muy cauto, muy prudente al momento de decidir su compra, lo que hizo que hayamos tenido un año en unidades menor a 2011", explicó el secretario de CAME.
Pero a pesar de la cautela del consumidor, "las ventas especiales -tal como se consideran a fechas como Día del Padre o Día de la Madre- demostraron que el público respondió mejor que en 2011, lo que hace presumir que la verdadera razón del comportamiento el resto del año es precisamente la prudencia y la cautela". La decisión de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner de no contabilizar el Impuesto a las Ganancias para el aguinaldo de salarios de hasta 25.000 pesos, también tendrá su peso en el crecimiento de las ventas.
Al realizar el anuncio, Cristina dijo que el costo fiscal de la decisión será de 2.162 millones de pesos que serán transferidos a los asalariados. "Esta medida influye en el porcetanje, porque es dinero que antes estaba orientado al fisco nacional ahora llegará al bolsillo de la gente para volcarse al consumo, porque tampoco hay tantas posibilidades de ahorro y de inversion", consideró Lourenzo.