De este modo, la entidad se sumó al pesimismo mostrado por numerosos organismos internacionales, incluyendo el Banco Central Europeo (BCE), que el jueves pasado recortó las previsiones de crecimiento para la eurozona de este año.
Para el BCE, recién en 2014 se espera un incremento del PIB de 1,9% si se solucionan los actuales problemas de la región, detalló Europa Press.
"El 2014, el PIB real podría subir 1,9% si la crisis bancaria y de la deuda soberana de la zona euro no se agravan y gradualmente disminuye la incertidumbre entre inversores y consumidores", señaló el Bundesbank.