Este lunes cerró la 38 edición de la Feria de Libro de Buenos Aires con 1 millón 250 mil visitas. Mendoza tuvo su stand dentro del Pabellón Ocre, del predio ferial La Rural, destinado a las diferentes provincias y organismos.
Este lunes cerró la 38 edición de la Feria de Libro de Buenos Aires con 1 millón 250 mil visitas. Mendoza tuvo su stand dentro del Pabellón Ocre, del predio ferial La Rural, destinado a las diferentes provincias y organismos.
El espacio fue titulado bajo el nombre de Aballay y otras emociones en lo alto, en alusión al cuento de Antonio Di Benedetto. En uno de sus laterales se plasmó la figura del destacado escritor mendocino y del otro la imagen del gaucho.
Martí señaló que se exhibieron 320 títulos; entre publicaciones independientes, de editoriales comerciales y de Ediciones Culturales. Además se pusieron a la venta obras de Di Benedetto que se encontraban agotadas y que fueron nuevamente publicadas por Adriana Hidalgo, editora. Vendiéndose más ejemplares que en el propio stand de la librera.
Además de las presentaciones de escritores, se proyectaron varios documentales: La gente que entraba al stand tenía una imagen de lo que se filma en Mendoza en torno a nuestros creadores, comentó el funcionario de cultura.
A diferencia de la edición pasada que respondía a la gestión cultural del ex gobernador Jaque este año el área no propició directamente la presencia de los literatos en el stand. Respeto a esto Martí explicó: Los escritores mendocinos que fueron a presentar libros al stand, básicamente fueron por voluntad propia ( ) Yo siempre les explico que el stand no es un buen foro para presentar un libro, porque está inserto en el pabellón donde están todos los organismos. Vos estás presentado un libro y, por ejemplo, al lado está la gente de Tucumán bailando un malambo.
Para la provincia el saldo del paso de Mendoza por la Feria del Libro fue positivo. La cifra de visitantes no arroja un número exacto pero sí se puede determinar que fue uno de los espacios más visitados, por su ubicación estratégica justo en la entrada del pabellón Ocre. Esta ubicación, fue pagada en la suma 25 mil pesos por parte del Consejo Federal de Inversiones, según detalla el funcionario.
Sobre el punto diferencial del stand mendocino sobre las propuestas del resto de las provincias destacó:
El stand de Mendoza fue casi el único de todas las provincias que privilegió el libro por sobre todas las otras actividades ( ) Otros tenían empanadas, malambo, cualquier cosa menos la unión entre el lector y el autor como es que tiene que suceder. Para nosotros el ámbito natural del libro es para el encuentro de autores y lectores. Y privilegiamos eso.
El desafío para el año próximo
Es la primera experiencia de la presencia de Mendoza en la Feria del Libro de Buenos Aires, bajo la gestión de cultura a cargo de su titular, la ministra, Marizúl Ibáñez. Los desafíos para los años que restas son varios y Leonardo Martí comenta al respecto:
El primer desafío es hacer algo más comprometido desde la fundación que organiza (Fundación El Libro). Nosotros desde el Ministerio podemos hacer mucho, pero si después no está inserto en una coyuntura más organizada que priorice la lectura Me parece que se privilegia demasiado lo mercantil por sobre el hecho de la lectura. Y los tres años que restan hay que seguir afianzando las letras mendocinas como algo de muchísimo nivel. A diferencia de otras provincias nosotros teníamos libros de excelentísima línea para mostrar. Se vendieron muchos libros porque Mendoza tiene una industria editorial lindísima.
El día que Mendoza fue protagonista en la Feria del Libro
El domingo 6 de mayo, en la Sala Jorge Luis Borges del encuentro de las letras, se celebró el Día de Mendoza. Al evento asistieron unas 200 personas entre autoridades, periodistas, escritores locales y público en general.
Allí, en primer lugar se entregaron los premios de las obras ganadores del Certamen Literario Gran Premio Vendimia (dramaturgia, poesía y cuento), con la presencia de los autores en la sala. Luego se produjo uno de los momentos más exquisitos. Un diálogo entre Jorge Enrique Oviedo (reconocido escritor y periodista) y Juan Sasturain (prestigioso y prolífico escritor), quienes evocaron luces y sombras de la invaluable obra de Antonio Di Benedetto.