Varios casos

Vuelven a la cárcel varios presos reincidentes en San Rafael

Podría tratarse de un simple robo más, pero la reiteración de hechos similares a manos del protagonista de este hecho, lo tornan una consuetudinaria y preocupante muestra de las formas repetidas que adquiere el accionar delictivo cuando se torna una forma de vida. 

El pasado 21 de marzo alrededor de las nueve de la noche, Ariel Léonidas Ortega se subió por una medianera para ingresar en la casa de una esquina de calles Iselín y Salta, en un barrio céntrico sanrafaelino, pero con la mala suerte de que la dueña estaba en la propiedad. 

Minutos después, la policía lo atraparía y quedaría encausado bajo la calificación de tentativa de hurto. El asunto es que llevado a la audiencia de prisión preventiva, que presidió el juez Gabriel Ravagnani, Ortega se encontró con la típica recolección de antecedentes que hace el Ministerio Público Fiscal, y el frondoso prontuario hallado por el fiscal Javier Giaroli dio cuenta de que ya en marzo, pero del año 2015, este muchacho había sido condenado también por un intento de hurto, en el que fue hallado con un arma en su poder, a la pena de 1 año de prisión. 

Era su segunda condena, pero su primera reincidencia. Tres años después, repitió sus andanzas y le dieron dos meses y 20 días de cárcel, en su segunda reincidencia, y tercera condena, también tras haber fallado en otro hurto. 

Cinco meses después de esta sentencia, recibió otra pena, esta vez tras haber alcanzado a robar, en su tercera reincidencia delictiva. La cuarta fue por otro hurto frustrado, pero esa reincidencia le hizo cumplir una pena de medio año de prisión. 

Al año siguiente, ya 2019, lo depositó tras las rejas, su quinta reincidencia, allá por el mes de mayo, dónde sólo recibió 2 meses y 15 días de pensión en la cárcel sanrafaelina; lo que le permitió que en agosto, tras reincidir por sexta vez.

No terminó el año en libertad porque en diciembre fue condenado de nuevo, esta vez por un robo que alcanzó a consumar, con lo que desde diciembre debió cumplir 45 días de arresto, en su séptima repetición delictiva. 

El año 2020, a pesar de las condiciones poco propicias para el delito, se las arregló para violar la propiedad ajena y las normas establecidas en tiempos de cuarentena, llevándose un vehículo sin el conocimiento ni mucho menos consentimiento de su dueño. Le dieron a Ortega 6 meses de cárcel. 

Es decir, ocho reincidencias que, sin embargo, parece que no le sirvieron de escarmiento, ya que, como dijimos, otra vez fue llevado esposado a declarar ante un magistrado por la infructuosa intención de hurtar a fines del mes pasado. 

El riesgo procesal esgrimido por Giaroli fue, obviamente, esa anomia de Ortega que no lo tiene en este 2021 sólo en episodio como posible protagonista, ya que en el primero de febrero último, se quedó con una bicicleta ajena. San Rafael, por cierto, tiene a varios delincuentes reincidentes en la mira, algunos de los cuales han batido récords en los últimos años. 

Además, de Ortega, cabe mencionarse el caso de Norberto Ariel Oga Sambrano, célebre ya no sólo por la cantidad de reincidencias, seis, sino por la velocidad con la que salió y se guareció en sede penal. 

Es que "el Mayonesa!", como se lo reconoce en el mundo del hampa sur mendocino, el 16 de marzo último, minutos antes de las 7 de la tarde rompió el sensor de alarma de una campera en un comercio sanrafaelino, para llevársela sin permiso ni pago alguno en la caja.

El empleado a quien le pidió medirse la campera, encontró en el probador la alarma tirada, lo siguió y marchó preso Oga. La marca que dejó establecida Norberto está dado por el hecho de que el 15 de marzo había salido de la cárcel

Es decir, no aguantó ni 24 horas libre sin delinquir.Además, Giaroli verificó que este hombre conocía dónde viven los testigos que lo incriminaron, por lo que se encargó de pedir especialmente en la audiencia de prisión preventiva, que lo dejaran "adentro" durante el proceso.

La buena noticia es que en los últimos días, el fiscal ha logrado "meter" a varios de nuevo entre rejas y va hoy por otros. Entre ellos un tal Amaya, acusado hasta de robarle a un ex juez sanrafaelino, hace un par de semanas; a un tal Sánchez, alias "Laucha por tirante", quien tiene en su haber 5 casos probados, y unos jovencitos de apellido Hernández, también dedicados al apoderamiento indebido de bienes ajenos.

Te Puede Interesar