"¿Tan poco vale la vida de una chica que recién empezaba a vivir? Yo no estoy conforme". Las palabras de Nuri Ribotta, madre de Paula Toledo, frente al tribunal que condenó a 11 años de prisión a Marcos Graín por el asesinato de su hija, se replicaron en las redes sociales, donde se percibió la sensación de que, una vez más, la justicia no fue tal para una familia que hace 17 años espera que los responsables del femicidio paguen por lo que hicieron.
Los jueces Ariel Murcia, Alejandro Celeste y Esteban Vázquez Soaje encontraron culpable al único imputado del delito de "partícipe necesario de abuso sexual con acceso carnal agravado por la participación de dos o más personas", pero lo desvincularon del homicidio. De ese modo, entendieron que Graín entregó a la joven al grupo que violó en dos ocasiones, la torturó, desfiguró y mató; pero que no participó del hecho de sangre.
El inconformismo e indignación por el fallo en el tercer juicio por el lamentable hecho ocurrido en San Rafael en 2003 se replicó entre la política mendocina, que fustigó al Poder Judicial por el dictamen. Los cuestionamientos llegaron fundamentalmente de dirigentes del Frente de Todos y el Frente de Izquierda.
La presidenta del Partido Justicialista de Mendoza y senadora nacional Anabel Fernández Sagasti, lamentó que la familia de Paula "tuvo que esperar 17 años para que el único imputado en la causa reciba una condena de sólo 11 años. Un fallo que está muy lejos de ser ejemplo de justicia".
En el mismo sentido se expresó la diputada nacional Marisa Uceda, quien replicó que " el Poder Judicial de Mendoza vuelve a demostrar no estar a la altura de su deber". "Después de 17 años el homicidio de Paula Toledo no encontró justicia. Usen la toga para taparse la cara", disparó, en alusión a la autorización de la Corte local al uso de esa tradicional vestimenta en jueces del fuero penal.
El titular de la bancada peronista en el Senado provincial, Lucas Ilardo, también disparó contra el dictamen del máximo tribunal para repudiar el funcionamiento del Poder Judicial. "Sigan tonteando con la toga y demás estupideces de su mundo y teniendo fallos como el de hoy", escribió en Twitter.
"¿Cuánto creen que pueden jugar con la gente? ¿Cuán lejos quieren estar de la sociedad? ¿Cuánto van a tensar la cuerda? Un fallo que da vergüenza. Una justicia que da asco" sostuvo.
Su compañera de bancada, Cecilia Juri, planteó la necesidad de reformar la Justicia y manifestó sobre el caso Toledo: "Vergüenza la condena y todo el proceso que demoró 17 años". "Con este tipo de fallos se revictimiza y se violenta a todas. Justicia lenta no es Justicia", manifestó, en tanto, la también senadora Florencia Canali.
Por su parte, la diputada provincial del PTS, Mailé Rodríguez, destacó que en 17 años "la justicia no investigó. No movieron un dedo para saber la verdad. Dilataron todo. Se perdieron pruebas". ¿Cuánto fango hay en esos tribunales de la impunidad? Solo podemos confiar en nuestra propia fuerza y organización", planteó.
En esa línea, ponderó que la sin la perseverancia de la madre de Paula y las mujeres organizadas, "esos millonarios de toga no hubiesen movido un dedo. Por eso hay que tirar abajo los privilegios de esa justicia patriarcal".
"Sus tribunales, sus togas, sus décadas de inmundicia convertida en estrados de impunidad... nunca harán justicia a tantos crímenes. La Justicia por Paula Toledo va a llegar con la fuerza de las que en 17 años no se cansaron. Las que no fueron ni serán derrotadas", puntualizó el también legislador del PTS, Lautaro Jiménez.
Del lado de Cambia Mendoza, la concejala lujanina y presidenta de "PRO Mujeres Mendoza", Cecilia Páez, también hizo hincapié en la espera de 17 años de la familia "para que la Justicia condenara a sólo 11 años de prisión al único imputado por violación y homicidio". "Esto no es justicia", lanzó la ex senadora, la única del oficialismo en manifestarse sobre el caso hasta el momento.