El acercamiento diplomático entre la Argentina y Gran Bretaña y la política instrumentada por el presidente Mauricio Macri durante su participación en la Asamblea General de las Naciones Unidas despertaron cuestionamientos de la ex presidente Cristina Kirchner, cuyo gobierno mantuvo una relación de extrema confrontación con el Reino Unido.
"Hoy quiero hablar de memoria, historia y desagravio. Quiero desagraviar a todos los que dieron la vida por la Patria y por las Islas Malvinas. Porque cuando uno escucha hablar tan ligeramente de las cosas, tiene tendencia a decir 'qué maldad', pero no hay que atribuirlo a la maldad, sino apenas a la estupidez", aseguró la ex jefa de Estado en un acto realizado en La Plata.
La convocatoria fue realizada por la conducción de la Federación Universitaria de La Plata (FULP) y se desarrolló en las instalaciones del Club Atenas de la capital bonaerense.
Como viene sucediendo en sus últimas apariciones públicas, la ex jefa de Estado aprovechó su discurso para orientar a la militancia sobre cómo deben encarar el futuro. En ese sentido, les aclaró que "la democracia es por definición heterogénea y la construcción política nacional y popular no puede dejar de ser heterogénea". Sobre esta cuestión volvió en numerosos pasajes. "El frente tiene que ser diverso", insistió, en relación al frente ciudadano que impulsa.
También aprovechó para enumerar los que considera logros de su gestión y les propuso "tomar cuatro o cinco ideas que puedan permitir la identificación del pueblo" y que las comuniquen de manera "sencilla".
Por supuesto que la cuestión Malvinas no fue el único dardo hacia Macri."Este país vuelve a ser desigual, injusto, inequitativo", advirtió sobre el final.