Ya eran algunos años de quedarse en la puerta, pero la edición 2016 de la etapa provincial de los Juegos Evita fue la indicada para que el equipo de handball femenino sub 14 que dirige el profesor Guillermo Rojo. Campeonas de Mendoza y pasaporte a Mar del Plata para jugar la parte Nacional en la última semana de octubre.
"Todavía no terminamos de caer. Hace mucho que jugamos esta instancia y siempre nos quedamos en la puerta, por suerte ahora se nos dio. Ahora hay que preparar todo para llegar de la mejor manera posible a Mar del Plata" arrancó su relato el entrenador.
Este final de ensueño no había comenzado del todo bien. "Llegamos el miércoles para hospedarnos y el jueves muy temprano ya había que ir a jugar a San Martín, con muy pocas horas de descanso. Para colmo hubo un corte de ruta y el traslado no llegó a tiempo, por lo que todo se atrasó y terminamos jugando a las 11 y media cuando el partido era a las 9" comentó Rojo.
El debut con un peso pesado marcó a fuego a las chicas. "Nos tocó Maipú, que es cuna del handball. Nos sentíamos un poco presionados, para colmo de nuestra zona de cuatro solamente pasaba uno. Después de un primer tiempo apretado hicimos la diferencia en el segundo y lo ganamos, eso nos hizo sentir prácticamente en semi. Para colmo por diversos motivos los otros dos encuentros no se jugaron. El viernes en Maipú logramos eliminar a San Carlos" siguió el DT.
La cita decisiva no fue algo improvisado para las jóvenes alvearenses. "Al partido del sábado con Tupungato lo planificamos el viernes por la tarde con las chicas en el hotel. Al comienzo ganábamos por cuatro o cinco goles, después se fueron soltando y terminaron ganando 20 a 9. Esa fue la gran rareza del torneo, ganar todos los encuentros por 11 goles de diferencia" cerró Rojo.
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