La titular del Sute, Carina Sedano, ya expresó la disconformidad respecto a la propuesta.
Foto: Yemel FilEl Sindicato Unido de Trabajadores de la Educación (SUTE) rechazó la nueva oferta que llevó el Gobierno a la mesa paritaria y anunció una profundización de las medidas de fuerza, que se votarán la semana próxima en un plenario. Los representantes del Ejecutivo indicaron que la propuesta implica “el máximo esfuerzo que puede realizar en el contexto macroeconómico que se encuentra el país y la provincia” y no fijó nueva fecha de audiencia, por lo que la negociación quedó virtualmente cerrada.
Tras el pase a cuarto intermedio en la mañana, por la tarde volvieron a encontrarse las partes con la promesa de la patronal de mejorar los porcentajes presentados horas antes y llevar una simulación que grafique el impacto real del planteo. La posición oficial es que el ofrecimiento actualizado alcanza un incremento acumulado del 44% en agosto, que superaría el 38,2 por ciento de inflación (a junio) que registra Mendoza en lo que va de 2022.
“De esta manera, un docente que recién se inicia y tiene un cargo tendrá un sueldo promedio de $70.000 y llegará a $140.000 en caso de tener dos cargos. Un docente con 15 años de antigüedad y 50% de zona percibirá $78.000 por un cargo y $156.000 por dos cargos. En tanto que un docente con 25 años de antigüedad y 50% de zona alcanzará $94.000 con un cargo y $188.000 con dos cargos”, detallaron desde el Gobierno en un comunicado post reunión.
Concretamente, se llevó a la mesa una moción que incluía tres alternativas, tanto para docentes como para celadores. Todas contemplaban el aumento del básico del 7% para el mes entrante (que se suma al 5% ya otorgado con anterioridad), e incorporaban distintas opciones de subas de algunos adicionales salariales, como el “Estado Docente” y el “Convenio Celadores Paritaria 2008”. Una de las posibilidades preveía incluso una modificación del bono anual remunerativo de $7.200, que pasaría a ser de $10.000 (dato anecdótico: en el acta final, este apartado no fue incluido en el segmento de celadores, por lo que dos de las alternativas eran prácticamente idénticas).
Los dirigentes del SUTE consideraron todas las opciones “insuficientes” y especificaron que representan subas en los sueldos de $7.800 para celadores y $8.000 para docentes. En diálogo con Sitio Andino, el secretario gremial del sindicato - Gustavo Correa- aseguró que las cifras que divulgó el Gobierno “son mentirosas” y tildó a la administración de Rodolfo Suarez de “cobarde” por “hacer circular placas anónimas con montos que no son reales y sin dar la cara”.
Anticipó que endurecerán las medidas de acción directa y que se manifestarán en “cada acto público del Gobierno porque no queremos ser más la variable de ajuste”. La semana que viene el gremio desarrollará plenarios departamentales donde votará los pasos a seguir, que muy probablemente contengan un nuevo paro en las escuelas, pero esta vez de 72 horas.
“Queremos una paritaria seria, que represente los intereses de los trabajadores. Que no perdamos frente a la inflación como sucedía con estas propuestas y dejemos de ser los peores pagos del país”, señaló Correa. Asimismo, adelantó que en caso de que la gestión provincial imponga el aumento por decreto, “lo combatiremos en las calles”.
Por su parte, la secretaria general Carina Sedano cuestionó que los miembros paritarios del Ejecutivo no llevaran respuestas sobre otros reclamos que elevó el SUTE, como no descontar los días de paro y la ilegalidad de la resolución de la DGE que impide las asambleas en horas de clase, entre otros.
“Vamos a seguir construyendo en las escuelas un plan de lucha para la semana que viene, para demostrar que tenemos dignidad y que queremos una propuesta que esté por encima de los índices inflacionarios”, sentenció.
La subsecretaria de Gestión Pública y Modernización, Beatriz Martínez, indicó que el rechazó del sindicato se toma como definitivo, por lo tanto se trabajará "directamente en el decreto, porque el Gobierno quiere asegurar que los incrementos lleguen a los agentes estatales". E hizo mención a los cambios de gabinete en Nación que se llevaron a cabo en la tarde para definir el momento macroeconómico que atraviesa el país, que afectan la oferta que se pudiera elevar. " Cuando nos reunimos esta mañana teníamos una ministra de Economía y ahora el ministro es otro. Es muy difícil ser previsibles en ese contexto", resumió.