La policía ya tiene a tres detenidos por el homicidio ocurrido esta madrugada en Luján de Cuyo. Serán imputados e irán presos.
Abel Jonathan Aparicio, la víctima del homicidio en Luján de Cuyo. Tenía 28 años.
La justicia avanza a pasos agigantados en el esclarecimiento del homicidio de Abel Aparicio (28), el hombre que fue asesinado de un balazo en su casa de Luján de Cuyo, hecho en el cual también fue baleada su madre y un hermano sufrió heridas por golpiza.
Durante las primeras horas de investigación, la policía detuvo a tres de los presuntos autores del homicidio: un hombre y sus dos hijos. Uno de ellos perdió el DNI en la escena del crimen y eso fue clave para agilizar las capturas.
En tanto que por estas horas, los investigadores intentan identificar al resto de los responsables.
De acuerdo a la reconstrucción de los hechos, se sabe que Aparicio y su familia fue atacado cerca de la 1 de la madrugada de este martes en su casa de Ugarteche, ubicada sobre calle Cooperativa, en Luján de Cuyo.
Al menos seis sujetos, con armas de fuego, cuchillos y hasta palos, irrumpieron en el hogar. El apuntado era Aparicio y el objetivo, al parecer, era claro: matarlo.
Los individuos lo golpearon y le dispararon en el pecho. En medio del ataque intervino el hermano de la víctima, pero también fue golpeado duramente. Lo mismo ocurrió con la madre de ambos, Marta Valente (51), quien recibió un balazo en el brazo -salvó su vida de milagro-.
Luego del brutal ataque, los agresores robaron un televisor y escaparon de la casa. En la huida, a uno de los autores se le cayó el DNI.
Cuando la policía llegó a la escena encontró el documento. El mismo era de un joven llamado Benjamín Alcarriasca (18) y domiciliado en calle Segundo Sobra de Godoy Cruz.
Con la premura del caso, los efectivos pidieron un allanamiento de urgencia y de forma telefónica, la jueza Dolores Ramón autorizó la medida.
En el procedimiento, los sabuesos encontraron al hermano de Benjamín, Matías Alcarriasca (22), quien fue detenido. Esto porque en la vivienda estaba el auto en el que, según las víctimas, se movilizaban los autores del crimen: un Peugeot 504 azul.
Además, los detectives incautaron un celular y algunos objetos de importancia para la causa.
Horas después, la madre de Matías llamó al 911 y aseguró que su otro hijo y su pareja, querían entregarse. Entonces, otra comitiva de policías de investigaciones se dirigió al lugar y detuvo a Benjamín y Juan Pablo Alcarriasca.
Los tres sospechosos quedaron detenidos a disposición del fiscal Gustavo Pirrello, quien por estas horas reúne pruebas para definir la calificación penal del crimen.
La misma será un homicidio agravado por arma o bien agravado por la premeditación de dos o más personas (si hay pruebas para demostrar que los agresores planificaron y perpetraron el homicidio).
El móvil que investiga la justicia es una vieja disputa entre las dos familias, la cual se habría originado, en primera instancia, entre las víctimas y Juan Pablo Alcarriasca, quien vive a unos 2000 metros de donde ocurrió el homicidio.
Fuentes judiciales dijeron que esa disputa fue “escalando” en las últimas semanas hasta el desenlace fatal de esta madrugada.
En ese sentido, en las próximas horas declararán familiares del hombre asesinado, para aportar datos acerca del motivo por el cual los Aparacio y Alcarriasca mantienen una vieja enemistad.